Ibex: mucho ruido y pocas nueces
Tras muchísimas semanas peleando por romper la zona de resistencias comprendida entre los 9.400 puntos y los 9.500 puntos, finalmente[…]
Tras muchísimas semanas peleando por romper la zona de resistencias comprendida entre los 9.400 puntos y los 9.500 puntos, finalmente con el aliciente de la mayoría absoluta más que holgada de Boris Johnson y el acuerdo comercial entre EE.UU. y China se pudo consumar. Sin embargo, una semana en la que aparentemente lo teníamos todo a nuestro favor para poder ver un vencimiento del futuro del IBEX lo más cercano posible a los 9.900 puntos y de esta manera comenzar de manera contundente el esperado rally de Navidad, finalmente se ha quedado en nada.
Y es que si bien es cierto que desde el punto de vista de colocación de posiciones de las opciones que vencen esta tarde a las 16:45 lo teníamos todo muy fácil, el ver como Boris Johnson va a consumar el Brexit sí o sí el 31 de enero próximo y solo quiere un periodo transitorio de un año y no de tres como estaba anteriormente no está gustando a los inversores.
La votación de prohibición de extensión más allá de un año se va a producir esta tarde coincidiendo con la apertura de los mercados estadounidenses, pero a diferencia de otras ocasiones en las que se ha votado el plan a implementar para salir de la Unión Europea, esta vez al tener una cómoda mayoría absoluta no tendrá ningún tipo de problema en conseguirlo.
Así que no queda otra opción que Bruselas se ponga las pilas y se acuerden la bases para un gran y amplio acuerdo comercial porque realmente podemos salir muy perjudicados, o por lo menos esa es la impresión que ve he llevado de mi visita al centro del corazón financiero de la City.
He visto un país fuerte, potente y sin ningún miedo al Brexit, es más, están ya cansados de tanta incertidumbre al respecto. Todas las grandes empresas han protegido sus intereses moviendo sus sedes legalmente a Europa, la gran mayoría de ellas a Irlanda y en menor medida a Alemania, pero la estructura y operatividad no se ha movido. En definitiva, es un movimiento táctico idéntico al realizado por muchísimas empresas catalanas.
Tengo muy claro que las empresas van a continuar en Londres, no se van a mover, es más, no pueden moverse. Londres acapara un poder financiero inalcanzable para el resto de países de Europa y eso no va a cambiar jamás, uno por la situación geográfica de posición intermedia entre los mercados asiáticos y los mercados estadounidenses y otro porque simplemente la estructura financiera montada para poder intermediar los miles y miles de millones de dólares que se mueven cada día es imposible de moverla y solo de plantearlo asusta a cualquiera.
La City es y será el centro financiero en Europa. Por poner un ejemplo valga saber que el 60 por ciento de la contratación de bonos mundial se realiza desde Londres. Más vale que lleguemos a consensuar con ellos un buen acuerdo comercial porque realmente tenemos más que perder que ellos y Donald Trump está deseoso de sustituirnos.
Volviendo a los mercados, con un vencimiento encima de la mesa y una avalancha de datos macro para esta mañana (PIBs del tercer trimestre) se presenta movidita y posiblemente nos visite la hora bruja como suele ocurrir en los grandes vencimientos.
Desde el punto de vista técnico, nada ha cambiado. Tenemos una ruptura de resistencias el pasado viernes con un hueco que no se ha cerrado y es precisamente este hecho el que debe mantenerse así para poder confiar en que del rango actual generado desde el viernes acabaremos escapando por la parte superior para dar continuidad al rally de Navidad y buscar un cierre anual en máximos anuales.