La actas del BCE revelan la división sobre la orientación de los tipos
Las actas de la reunión del BCE muestran que el comunicado de la última reunión del organismo se tuvo que redactar dos veces
Las actas del Banco Central Europeo (BCE) sobre la reunión de julio reflejan que hubo un amplio debate sobre la orientación de los tipos de interés.
Se trataba de la primera reunión tras haber revisado la estrategia a principios de mes, en la que se elevó el objetivo de inflación hasta el 2 por ciento.
En la reunión del 22 de julio, se introdujo una nueva orientación en la reunión “que promete un período aún más largo de tipos de interés sin cambios o más bajos y vincula la primera subida a un aumento aún más pronunciado de la inflación”.
Según las actas, esta decisión no se tomó por unanimidad, sino que generó un amplio debate en el seno del organismo.
Acuerdo tras una reunión tensa
El acuerdo se produjo tras una reunión especialmente tensa en la que los responsables de la política monetaria tuvieron que redactar la orientación dos veces para encontrar un compromiso adecuado después de que se planteara un número inusual de objeciones.
«Una gran mayoría de los miembros indicó que podía apoyar la propuesta revisada de forward guidance», señalan las actas.
«Al mismo tiempo, unos pocos miembros mantuvieron sus reservas, ya que la formulación modificada no abordaba suficientemente sus preocupaciones».
Al final, sólo dos responsables políticos, los jefes de los bancos centrales alemán y belga, se opusieron a la redacción, que estipula que los tipos no subirán hasta que el BCE vea que la inflación alcanza el 2 por ciento, «muy por delante» de su horizonte de proyección.
Próxima reunión a principios de septiembre
El BCE se reunirá de nuevo el 9 de septiembre y tendrá que decidir si mantiene un volumen elevado de compras de bonos o permite que disminuyan, dada la caída de los rendimientos y el debilitamiento del euro desde la última reunión de política monetaria.
Si bien, también tendrá que valorar el hecho de que la variante Delta está introduciendo una gran incertidumbre sobre cómo afectará la evolución de la pandemia a la economía.