La bolsa tiembla con la llegada de los resultados
Los inversores se ponen en guardia ante la posibilidad de que numerosas empresas rebajen sus previsiones de beneficio
La temporada de presentación de resultados empresariales está a punto de comenzar y un punto de angustia se detecta en las bolsas.
No por lo que reflejen las cuentas de las cotizadas en el tercer trimestre, sino por las previsiones con vistas a la recta final del año, que son poco optimistas.
Este temor ha llevado a algunas casas de análisis a bautizar esta temporada como de “advertencias” de resultados.
La inflación se notará en las previsiones
Los expertos ven que la irrupción de la inflación se notará en los márgenes de las empresas, especialmente en el último trimestre del año. Por eso, aunque las cuentas hasta septiembre serán positivas, las miradas de los inversores se centrarán, especialmente, en los anuncios que hagan las compañías hasta final del ejercicio.
La mayoría tiene claro que los síntomas de desaceleración económica en las principales economías mundiales y el repunte de los precios marcarán los resultados de las cotizadas a partir de ahora.
Los buenos resultados de la primera parte del año ya son historia. Entramos en una nueva fase de incertidumbre que las bolsas pueden acusar.
En un principio los mercados esperaban esta temporada como un revulsivo para las cotizaciones, pero ahora tiemblan porque es muy posible que no se convierta en la gasolina necesaria para continuar los avances.
Los primeros resultados ya se están dando a conocer en varios países, aunque son de compañías con poca capacidad para mover los índices bursátiles.
JP Morgan romperá el fuego en los EEUU
No será hasta mediados de la semana que viene cuando la gran banca de inversión estadounidense, con JP Morgan a la cabeza, rompa el fuego.
No obstante, hay empresas que ya han publicado sus cuentas y que están dispuestas a llevar la contraria a los analistas.
Es el caso de Tesco, la cadena supermercados del Reino Unido, que elevó sus perspectivas para el resto del año, tras informar de un aumento de su beneficio del 17 por ciento, hasta los 1.880 millones de dólares.
Las ventas aumentaron también un 2,6 por ciento a pesar de las interrupciones en la cadena de suministro y la escasez de mano de obra, que en el Reino Unido es muy notable.
También Pepsico, el gigante de las bebidas, elevó sus pronósticos para todo el año debido a la reapertura de los lugares públicos, lo que ha impulsado la demanda de sus refrescos.
La compañía espera un incremento de sus ingresos del 8 por ciento este año.