La "guerra fría tecnológica" alarma a las Bolsas
Los activos de riesgo, desde las Bolsas hasta el petróleo, sufrieron, al tiempo que el dinero fluyó hacia los bonos, el oro y las divisas refugio.
El endurecimiento de las posiciones de los principales contendientes de la guerra comercial provocó nuevas caídas en los mercados de renta variable globales. Quizás el detonante del temor en las Bolsas vino de la mano de declaraciones procedentes de China, de un órgano de expresión del Partido Comunista, que advertía de una "guerra fría tecnológica" con Estados Unidos. La guerra comercial, puramente arancelaria, ha adquirido en los últimos días una nueva dimensión.
El peor selectivo en Europa fue el Ftse Mib de Milán, cuyo recorte fue de un 2,12%. Mientras, el Cac 40 francés y el Dax alemán se dejaron alrededor de un 1,8%. Algo mejor suerte corrió el Ibex-35, que cedió un 1,28%, para dar un último cambio en los 9.114 puntos. El único indicador europeo que bajó menos de un punto porcentual fue el PSI-20 de Lisboa.
Sólo dos valores del selectivo español cerraron en verde. IAG encabezó las ganancias, con una subida del 0,97%. A continuación se colocó Cellnex, con un avance del 0,20%.
En rojo, Técnicas Reunidas se llevó la peor parte con un retroceso del 5,10%. Mientras, Siemens Gamesa, ArcelorMittal y Ence bajaron más de un 4%.
El 'blue chip' doméstico que más cayó fue Repsol, que se dejó un 3,51%, mientras que Inditex retrocedió cerca de dos puntos porcentuales.
En la jornada de hoy sobrevivieron un poco mejor los bancos que en la de ayer, cuando fueron el principal lastre del selectivo. Santander y BBVA, por ejemplo, cerraron con caídas de poco más de un punto porcentual, pero en el caso de Sabadell y CaixaBank las pérdidas fueron de apenas medio punto porcentual y las de Bankinter no llegaron al 0,30%.
En Wall Street, más descensos. Al cierre de la sesión europea, todos los indicadores de la Bolsa de Nueva York bajaban más de un punto porcentual, hasta cerca de 1,5% en el caso del Nasdaq. En el Dow Jones, apenas dos valores, Home Depot y Coca-Cola, estaban en verde. En rojo, los peores eran United Technologies e IBM, seguidos de Chevron y Exxon Mobil.
Fuga de dinero a los refugios
El dinero que salía de la Bolsa se dirigía al mercado de bonos en busca de refugio. Así, los intereses de los títulos de deuda soberana cayeron con fuerza. El rendimiento del bono estadounidense a diez años cayó desde el 2,37% hasta el 2,32%, su nivel más bajo desde finales del año 2017. La rentabilidad de su comparable alemán pasó desde el -0,08% hasta el -0,12%. La del título español a diez años marcó el 0,84%, nuevo mínimo histórico.
También entraron flujos de capitales en el oro: al cierre de la sesión europea el precio de la onza subía un 1%, hasta los 1.286 dólares.
Además, fluyó la inversión hacia las monedas refugio. Así pues, se apreciaron el yen japonés y el franco suizo tanto contra el dólar como contra el euro. Mientras tanto, la divisa comunitaria avanzaba un 0,15% frente al billete verde, hasta situarse el tipo de cambio en la cota de 1,1165 unidades.
Síntoma también de la creciente aversión al riesgo fue la significativa depreciación de monedas emergentes.
Además, se observó un verdadero desplome en el precio del petróleo en su peor jornada de todo este año y desde el 24 de diciembre. El barril de Brent, de referencia en Europa, caía un 4,5%, hasta los 67,8 dólares, su nivel más bajo desde finales de marzo. El barril de West Texas, de referencia en Estados Unidos retrocedía un 5,2%, hasta los 58,22 dólares, mínimos también desde marzo. Así se entiende que entre los peores valores del Ibex-35 se colocara Repsol y entre los peores del Dow Jones se situaran las grandes petroleras.