Lagarde se enroca en su tesis de que la inflación es temporal
La presidenta del BCE obvia que la inflación está desbocada y alcanzó en España máximos de casi tres décadas.
Todas las miradas estaban este jueves en la rueda de prensa de la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, después de conocerse que la inflación en España alcanzó el 5,5 por ciento, el nivel más alto desde hacía 29 años, y que la de la eurozona escalaba hasta el 2,1 por ciento.
Sin embargo, la directiva volvió a insistir que la escalada de precios es de carácter transitorio. Así señaló que la inflación en la eurozona aumentará este año, pero espera que se reduzca en el siguiente ejercicio. "La presión de la inflación debería reducirse en 2022", aseveró.
Al mismo tiempo, se congratuló de que las circunstancias de financiación siguen siendo favorables.
"Hemos debatido mucho y hecho un gran análisis. Y creemos que nuestro análisis de que la inflación será transitoria es correcto", se ha defendido Lagarde. Sí ha reconocido en todo caso que la energía "es el principal riesgo" y ha señalado que si continuara subiendo "podría suponer un freno para la recuperación".
Mantiene las previsiones
Lagarde señaló que los riesgos para la economía están plenamente equilibrados. Esto permitirá a la economía de la eurozona alcanzar el nivel anterior al estallido de la pandemia antes de que acabe el año.
A pesar de la subida de la inflación y la posibilidad de una ralentización económica, o incluso estancamiento, Lagarde ha descartado que haya estanflación.
No obstante, mostró su intención de mantener el programa de compras pandémico, conocido por sus siglas en inglés como PEPP hasta marzo de 2022.
El BCE mantiene inalterada la política monetaria
El BCE decidió mantener sin cambios su política monetaria. Así, dejó inalterados los tipos de interés en el 0 por ciento, nivel en el que se encuentran anclados desde marzo de 2016.
Tampoco hubo cambios en la tasa de depósitos, que es la cantidad que cobra a los bancos por tener el dinero en el BCE, en el -0,50 por ciento.
La reunión de octubre es de transición hasta la de diciembre, donde el BCE evaluará de nuevo la economía europea y podría anunciar el volumen de reducción de compras.