Más desigualdad... también entre los propietarios de acciones
Sólo los mayores de 65 años y los hogares con mayores ingresos aumentan su posición en la Bolsa
Estados Unidos es el paraíso de las estadísticas y las encuestas. Además de disponer de riquísimos informes oficiales, el país cuenta con institutos privados de gran prestigio, como Gallup. Bien, pues este último acaba de publicar un estudio sobre quiénes tenían acciones antes del estallido de la crisis y quiénes las poseen una vez que se ha instalado la recuperación económica en Estados Unidos y, sobre todo, en su mercado de valores, que comenzó su remontada en marzo de 2009 y lleva marcando máximo tras máximo desde principios de 2013, que fue cuando superó los niveles previos al último desastre financiero.
Si el aumento de la desigualdad de ingresos ha sido una constante en los últimos años, la de la propiedad de fuentes de rentas o activos financieros, en particular de acciones, el caso que nos ocupa, también se ha incrementado. Sólo entre los hogares con rentas anuales por encima de los 100.000 dólares se ha incrementado el número de propietarios de títulos cotizados en Bolsa. Si entre 2001 y 2008, el 88% de los hogares más ricos de EE.UU. tenían dinero invertido en renta variable, entre 2009 y 2017, ese porcentaje alcanza el 89%.
Entre los hogares con ingresos de menos de 30.000 dólares, si antes de la crisis sólo un 27% tenían acciones, ahora ese porcentaje se ha reducido al 21%. Y entre los hogares que ingresan entre 30.000 y 74.999 dólares, el porcentaje de los que tienen dinero invertido en Bolsa ha bajado desde el 67% hasta el 54%.
En definitiva, los hogares con ingresos inferiores a los 100.000 dólares tienen menos probabilidad de tener acciones ahora que antes de la crisis.
Por edades, sólo ha aumentado el número de personas con acciones entre los mayores de 65 años: del 53% al 54%. Quienes más han bajado la tenencia de acciones han sido los jóvenes de entre 18 y 29 años (si antes de la crisis un 42% de ellos tenía inversiones en Bolsa, ahora sólo un 31% de ellos está sacando provecho de la histórica recuperación de los índices de Wall Street). Baja casi diez puntos el porcentaje de personas con acciones en edades entre los 30 y los 49 años (del 71% al 62%), y en siete puntos en edades comprendidas entre los 50 y los 64 años (del 69% al 62%).
También ha diferencias entre los diferentes grupos étnicos del país. Así, entre quienes más ha caído el número de personas que invierte en acciones ha sido entre los hispanos, al retroceder del 51% al 37%.
Si antes de la crisis un 66% de la población blanca tenía acciones, ahora sólo un 60%.
Entre la población negra, la caída ha sido inferior, de sólo cuatro puntos, pero si antes de la crisis eran los que menos invertían en Bolsa, ahora siguen siéndolo (en estos años, su participación en el mercado de valores ha bajado desde el 40% hasta el 36% actual).
Wall Street perdió más de la mitad de su valor durante la crisis financiera y muchos inversores respondieron a ello sacando su dinero de la Bolsa. Aunque el mercado se ha más que repuesto de las pérdidas, ahora hay menos americanos en posición de beneficiarse de esas plusvalías acumuladas desde los mínimos que marcó el mercado en marzo de 2009.
¿Cuáles son las causas de que ahora menos gente invierta en Bolsa en Estados Unidos?, ¿la caída de las rentas en ciertos colectivos de la sociedad americana?, ¿la reducción de la confianza en la Bolsa americana después de la fuerte crisis de 2007 y 2008?