Nvidia gana un 168% más pero sus previsiones no cumplen las elevadas expectativas

Nvidia gana 16.599M$ en su segundo trimestre fiscal pero sus previsiones de ventas del tercer trimestre dejan frío al mercado. Sus acciones retroceden un 4% en las operaciones posteriores a la publicación de los resultados

El fabricante estadounidense de microchips y tarjetas gráficas Nvidia logró en su segundo trimestre fiscal, finalizado en julio, un beneficio neto de 16.599 millones de dólares, cifra que supone incrementar en un 168,2 por ciento las ganancias del mismo trimestre del año pasado, según ha informado la empresa tecnológica.

Los ingresos de Nvidia entre mayo y julio sumaron un récord de 30.040 millones de dólares, un 122,4 por ciento más que un año antes, mientras que los costes aumentaron un 84,6 por ciento, hasta 7.466 millones de dólares.

Los ingresos del negocio de centros de datos de Nvidia en el segundo trimestre crecieron un 154 por ciento interanual y un 16 por ciento trimestral, hasta 26.300 millones de dólares, mientras que el área de juegos e IA facturó 2.900 millones de dólares, un 16 por ciento más que un año antes y un 9 por ciento más respecto del primer trimestre.

De tal modo, en los seis primeros meses de su ejercicio fiscal Nvidia obtuvo un beneficio neto de 31.480 millones de dólares, casi cuatro veces más que en el mismo periodo del ejercicio anterior, cuando ganó 8.232 millones de dólares, mientras que los ingresos sumaron 56.084 millones de dólares, un 171 por ciento más.

El mercado se queda frío con sus previsiones de ventas para el tercer trimestre

Sin embargo, a pesar de estos resultados, el mercado se quedó frío con las previsiones que dio la compañía. Anunció que las ventas del tercer trimestre serán de 32.500 millones de dólares. Aunque los analistas habían pronosticado una ganancia media de 31.900 millones de dólares, las estimaciones llegaron a los 37.900 millones de dólares.

Al no alcanzar estos pronósticos de ingresos algunas de las estimaciones más optimistas, en el mercado se avivó la preocupación de que su crecimiento explosivo esté disminuyendo.

La empresa también indicó que estaba solucionando problemas de producción con su muy esperado nuevo chip Blackwell, lo que afectó a las acciones en las últimas operaciones.

Las acciones cayeron alrededor de un 4 por ciento en las operaciones posteriores a la publicación del informe. Hasta el cierre del miércoles, su valor se había más que duplicado este año, tras una ganancia del 239 por ciento en 2023.

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