Trump, Corea, el Santander, Abertis, E.On, Walt Disney... los protagonistas de la semana

El selectivo español pasó de superar los 10.700 puntos aupado por la macro americana a perder los 10.300, algo que no ocurría desde abril, debido a la escalada bélica (de momento sólo dialéctica) entre Donald Trump y el Gobierno norcoreano. Santander, por ello, no pudo celebrar su última operación y aunque Abertis fue el valor que mejor resistió, no pudo esquivar los números rojos. 

El Ibex-35 comenzaba la semana con buen tono y el martes, cuando acumulaba ya cuatro sesiones consecutivas de avances siguiendo la estela positiva del final de la semana anterior, rebasaba los 10.700 puntos. Todo se complicó ese día justo después del cierre de las plazas europeas: Donald Trump advertía a Corea del Norte de una respuesta con "furia y fuego" si continuaba con sus provocaciones y esas declaraciones inauguraron una escalada de amenazas que culminó con Corea del Norte avisando del lanzamiento de misiles sobre la isla de Guam y con el presidente estadounidense informando de que está preparado para la guerra contra el país asiático. A partir de ahí, no hubo más que caídas para los índices de renta variable. Así, el Ibex-35 terminó su peor semana no sólo del año, sino desde la previa a la victoria de Donald Trump el pasado noviembre, con un descenso del 3,52%, el mayor de Europa, y todos sus valores en negativo, con Técnicas Reunidas y Bankia encabezando las caídas con pérdidas de más del 6%. El Ibex cerraba por debajo de los 10.300 puntos por primera vez desde abril.

Los índices europeos no rebotaron ni siquiera cuando lo hacía Wall Street el viernes después de conocerse en Estados Unidos un dato de inflación menor al esperado que reducía la probabilidad de una subida de tipos este año por parte de la Reserva Federal norteamericana. De hecho, Europa lo hizo bastante peor que Nueva York.

En coherencia con las ventas de acciones, vimos compras de deuda. La rentabilidad del título alemán a diez años ha bajado esta semana desde el 0,47% hasta el 0,38%. La de su comparable estadounidense, desde el 2,26% hasta el 2,19%. Además, el dinero entró en el oro, un tradicional refugio: el precio de la onza subió un 2,5%, hasta acercarse a los 1.290 dólares, su nivel más alto desde noviembre. En el mercado de divisas, las monedas ganadoras fueron el yen japonés y el franco suizo, que se apreciaron un 1% y un 0,7% frente al euro, y algo más respecto al dólar. De hecho, la divisa comunitaria perdió posiciones frente al billete verde (un 0,5%) y se alejó de su siguiente objetivo (1,20).

Desde el punto de vista corporativo, siguieron las operaciones corporativas y la presentación de resultados y ambos tipos de acontecimientos dejaron su impronta en el parqué.

La geopolítica impide la celebración en Santander. El Santander ha protagonizado la noticia corporativa más relevante de la semana en España, al anunciar la venta a Blackstone del 51% del negocio inmobiliario de su recién incorporado Popular, cuya integración ya tiene la bendición de las autoridades europeas de competencia. Con ello, el grupo bancario que preside Ana Botín reduce riesgo inmobiliario, mejora la tasa de morosidad y también los ratios de capital. Pero las acciones del banco no se han podido beneficiar de las consecuencias positivas de la operación por las turbulencias que ha habido en el mercado a cuenta de la crisis geopolítica entre Estados Unidos y Corea del Norte. De hecho, el Santander ha sido el tercer peor valor del Ibex esta semana, con un recorte de casi un 6%. En general, no ha sido una semana favorable para el sector financiero español. Y tampoco para el europeo: Deutsche Bank fue el peor valor del Eurostoxx con una caída del 9%.

Abertis cae, pero aguanta mejor. En una semana plena de pérdidas en el Ibex-35, la concesionaria de autopistas ha sido el valor que menos ha caído. Y no es que no haya beneficios que recoger: es el sexto valor más rentable del selectivo este año, con una subida del 26%. El consenso de analistas recomienda mayoritariamente mantener y sitúa su precio objetivo medio un 4% por debajo de la cotización actual. Pero en él cotizan cuestiones ajenas a fundamentales, como ser objeto de deseo de ACS y Atlantia, como mínimo.

E.On sube por sus cifras y a contracorriente. La eléctrica alemana sí ha salido verdaderamente airosa dentro del Eurostoxx 50, al anotarse un 5,09%. Ello, coincidiendo con la presentación de sus resultados del primer semestre, hinchados por la devolución del impuesto sobre la energía nuclear declarado ilegal por la justicia alemana. Éste está siendo un año extraordinario para la compañía, que es la mejor del Eurostoxx 50, con una subida del 38%. El consenso de analistas aún le calcula un potencial del 3,6%.

Al mercado no le gustan las intenciones de Walt Disney. La compañía estadounidense del sector del entretenimiento fue el peor valor del Dow Jones esta semana, con una caída del 5%, que le ha hecho entrar en pérdidas en el año. El mercado no se ha tomado bien sus resultados ni los anuncios que realizó aprovechando su presentación, como el retraso en el lanzamiento de sus nuevos contenidos deportivos para televisión o su intención de retirar sus productos de Netflix para poner en marcha su propio servicio de 'streaming'. El consenso le da un potencial del 14%.

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