Ibercaja apuesta por un proyecto "propio e independiente” para recuperar la rentabilidad
El banco presenta su plan estratégico 2021-2023, en el que prevé recuperar “con nota” la gran asignatura pendiente de la banca. Prevé un ROTE del 7% para dentro de dos ejercicios
Ibercaja apuesta por un proyecto “propio e independiente” en su nueva estrategia a 2023 para recuperar la rentabilidad de cara a los dos próximos ejercicios.
“El entorno va a continuar siendo hostil para la rentabilidad de la banca minorista”, señaló este miércoles el presidente del banco, José Luis Aguirre, durante la presentación del plan 2021-2023.
“Todos los proyectos que se han configurado van encaminados a su mejora”, explicó.
ROTE del 7%
En su nueva estrategia, el banco fija un objetivo de rentabilidad sobre fondos propios (ROTE) del 7%, con un payout del 50% para dentro de dos años.
Para ello, Aguirre aludió a las “fortalezas históricas” de la entidad, que cumple 145 años de historia, como la “visión a largo plazo” y la “prudencia” para “recuperar con nota” la asignatura pendiente de la rentabilidad.
Ibercaja quiere reforzar su posición financiera para llegar a una ratio de capital CET 1 fully loaded superior al 12,5% dentro de los dos próximos años.
El mismo porcentaje fijado en su anterior estrategia 2018-2020 y que ya superó al cierre del pasado ejercicio al marcar una ratio del 12,6%.
La salida a bolsa, a punto
Otro de los puntos clave de la estrategia de Ibercaja es su salida a bolsa, paralizada en marzo del año pasado por el estallido de la pandemia.
Según Aguirre, a lo largo de este ejercicio y del próximo surgirán “ventanas” en las que podría consumarse el salto a los parqués del banco pese a que “las perspectivas aún no son buenas”.
“Tenemos todo preparado para cuando las circunstancias acompañen”, aseguró, por su parte, el consejero delegado, Víctor Iglesias.
Descartada la fusión
Insistiendo en la idea de un proyecto en solitario, Iglesias descartó también la posible fusión del banco tras la posible operación Unicaja-Liberbank.
De esta forma, Ibercaja no tiene “en su hoja de ruta” ninguna operación corporativa y centra su proyecto en convertirse en una entidad “mejor y más competitiva”.
“Nos hemos ganado el poder seguir jugando en la partida del nuevo tablero”, dijo Iglesias, que apuntó que las entidades “que quedan” son “viables por sí solas”.
Mayor impulso digital
El consejero delegado de Ibercaja detalló que los planes permitirán incrementar en 50 puntos básicos el crédito a empresas, así como un crecimiento del 8% en la gestión de activos y un 6% en seguros de riesgo.
El ejecutivo aseguró que se ha impulsado una “significativa transformación” para convertir a Ibercaja en un banco “más digital, ágil y flexible”.
En este sentido, el banco planea multiplicar por 1,5 los nuevos clientes tanto en banca personal como en privada y aumentar en un 23% las empresas.
Asimismo, el consejero delegado hizo balance del último trienio 2018-2020, en el que se obtuvieron unos resultados “más que satisfactorios a pesar del último año”.
Ibercaja aumentó en ese periodo sus clientes particulares hasta superar los 585.000, más de 40.000 respecto al cierre de 2017. En el caso de las empresas, el aumento es de 7.000 clientes más hasta los 62.000.
El banco cerró 2020 con 840.000 clientes digitales al final del trieno frente a los 630.000 de hace cuatro años, mientras que el objetivo es llegar al 50% de las ventas a través del canal digital en 2023.
