El Covid-19 y la burbuja tecnológica son las dos grandes preocupaciones de los inversores
Un estallido de la burbuja tecnológica es el segundo tema que más inquietud genera después del Covid, según un estudio realizado por Bank of America
La burbuja tecnológica y la posibilidad de que estalle es uno de los riesgos que más preocupa a los inversores en el momento actual, según un estudio realizado por Bank of America.
Solo hay un tema que se sitúe por encima de esta preocupación y es la evolución de la pandemia de coronavirus que tiene contra las cuerdas a la economía mundial.
Esta fuerte preocupación por la posibilidad de un estallido de la burbuja es lógica si tenemos en cuenta que las acciones tecnológicas americanas constituyen la principal apuesta de millones de inversores en este momento. Es el posicionamiento más popular.
El 80 por ciento de los inversores, largos en tecnología
En concreto, la encuesta de Bank of America revela que el 80 por ciento de los participantes están largos en tecnología estadounidense, una cifra muy superior al 59 por ciento de encuestados que decía estar en la misma situación en agosto pasado.
Este fervor por las acciones del sector tecnológico estadounidense ha provocado una revalorización del selectivo Nasdaq del 25 por ciento, situándose en máximos históricos hace pocas semanas.
Aunque este rally no ha sido compartido por todas las acciones tecnológicas por igual. De este modo, han sido las ‘bigtech’ (los gigantes también conocidos como FAANGs, siglas de Facebook, Apple, Amazon, Netflix y Google) los mayores beneficiarios.
De todos modos, es importante precisar que el estudio de Bank of America fue realizado en la primera semana de septiembre, por lo que no recoge la percepción de los inversores sobre la corrección que han vivido estos valores en las dos últimas semanas (y que han acentuado el miedo a un estallido de la burbuja).
Invitaciones a la prudencia
Si bien, surgen invitaciones a la prudencia con este sector por todos lados. Benjamin Melman, CIO de Edmond de Rothschild AM, por ejemplo, escribió recientemente en este sentido.
“Las acciones tecnológicas han cumplido con las expectativas pero todo tiene un precio”, advirtió.
“No hay duda de que, en términos relativos, la tecnología ha sido la gran ganadora de la crisis del Covid-19. Sin embargo, no está tan claro que esto sea así en términos absolutos. De manera que, cuando las empresas empiecen a preparar sus presupuestos para 2021, después de un año particularmente difícil, será interesante ver lo que realmente pretenden invertir en tecnología, especialmente si se compara con las grandes esperanzas que impulsan las valoraciones actuales”, añadió.
Otro ejemplo reciente vino de un informe de Barclays en el que se cita “el miedo a una burbuja” y se asevera que “la dependencia creciente del sector tecnológico en la bolsa de los Estados Unidos la ha hecho especialmente vulnerable a un giro en el mercado”.
El propio Bank of America lleva semanas abogando por un ligero traspaso de fondos desde las acciones de crecimiento (fundamentalmente tecnológicas) hacia las de valor (más cíclicas), ante la creencia de que la eventual llegada de una vacuna contra el coronavirus servirá para reducir la brecha entre unas y otras acciones.