Prepárese para cinco años de recortes del dividendo
Un informe sobre el comportamiento histórico de la bolsa sitúa en cinco años, de media, la duración de los periodos bajistas de dividendos
La crisis del coronavirus ha tenido consecuencias terribles para las carteras de los inversores en renta variable. En forma de caídas de las cotizaciones y, también, de recorte de los dividendos.
Para este año, por ejemplo, se espera una bajada de la remuneración al accionista de entre un 25 por ciento y un 50 por ciento interanual en todo el mundo, según estimaciones de Schroders (entre un 15 y un 35 por ciento según estimaciones de otras casas como Janus Henderson, en este caso).
Y no parece que vaya a tratarse de una enfermedad pasajera. Más bien al contrario, los recortes de los dividendos podrían quedarse con nosotros bastante más tiempo del que se calcula que podría tardar en llegar una vacuna para el Covid-19 y del que la economía podría necesitar para recobrarse.
En concreto, un estudio elaborado por Schroders a partir de datos históricos de los últimos 149 años revela que, cuando se inicia un periodo de recortes de los dividendos (aquellos en los que los dividendos caen al menos un 20 por ciento), la remuneración al accionista tarda en recobrarse casi cinco años.
Crisis más largas si se tiene en cuenta la inflación
Y peores datos se obtienen si se tiene en cuenta la inflación. En concreto, si hacemos los cálculos con los dividendos reales (es decir, ajustados a la inflación) la media de un periodo bajista de los dividendos es de nada menos que nueve años, comparados con los 1,8 años que dura, de media, un mercado bajista de las rentabilidades totales reales.
Esto se debe a que, aunque las empresas suelen subir los dividendos una vez superada la crisis, estos siguen creciendo más lentamente que la inflación durante un período prolongado de tiempo.
Algunos datos del mercado apuntan en esta dirección. Así, los contratos de futuros de dividendos (que permiten a los inversores anticipar la evolución de los dividendos) están descontando más caídas de los dividendos en 2021.
Los mercados bajistas de las cotizaciones, más cortos
Este lapso de tiempo tan largo que suelen durar las rachas de recortes de dividendos contrasta con la duración de los mercados bajistas de las cotizaciones, que suelen ser mucho más cortos: 1,5 años, de media.
“Esto tiene sentido. Los precios de las acciones reaccionan antes de que mejore la economía, mientras que los dividendos no se recuperan hasta que las finanzas de las empresas mejoran”, explica Duncan Lamont, responsable de Investigación y Análisis de la gestora.
En el lado positivo, el informe también explica que los periodos alcistas de dividendos (aquellos en los que la remuneración al accionista aumenta al menos un 20 por ciento respecto al punto más bajo anterior) también duran más tiempo que los mercados alcistas de las cotizaciones (17,2 años en comparación con 7,4 años).
Si bien, Lamont explica que este dato está algo distorsionado por el mercado alcista de dividendos excepcionalmente largo que se produjo desde 1940 hasta 2008 (casi 70 años).
En todo caso, para suerte de los inversores, es preciso recordar que los mercados bajistas de dividendos son muy infrecuentes a lo largo de la historia.
En los últimos 149 años sólo se han producido seis, en comparación con los 16 mercados bajistas de rentabilidades totales que se han dado. “Estamos viviendo realmente en tiempos excepcionales”, dice por ello Lamont.
Motivos para la esperanza
Asimismo, hay motivos para la esperanza. Para ello, no hay más que recordar el periodo bajista de dividendos que se produjo entre septiembre de 2008 y marzo de 2010 y que “solo” duró dos años (en las acciones del S&P 500).
Asimismo, otras gestoras como Capital Group recuerdan que, a pesar de la grave crisis económica mundial, no todas las empresas están tomando el mismo camino. Así, algunas han reafirmado su compromiso de mantener los dividendos.
Ahí están los casos de las empresas europeas Nestlé, Zurich Insurance o BSF, que se han comprometido a repartir los dividendos según lo previsto.
En cuanto al mercado estadounidense, tanto Procter & Gamble como Johnson & Johnson han aumentado sus desembolsos y Starbucks también mantendrá sus dividendos, al igual que ExxonMobil.
En España, las compañías que van a cumplir con sus compromisos en este sentido son las eléctricas, ACS y Ebro Foods, entre otras. En sectores como el bancario, en cambio, se han producido numerosos aplazamientos y recortes.
Cautela
Aunque en Schroders son más bien cautos. “Aunque la limitada actividad económica podría reanudarse tan pronto como se suavicen algunas de las condiciones de bloqueo más estrictas, es poco probable que volvamos a algo parecido a ‘lo de siempre’ durante algún tiempo. Es probable que esto restrinja el apetito y la capacidad de que los dividendos se recuperen, al menos a corto plazo”, advierte el documento.
Y así lo apuntan los datos de los contratos de futuros. En concreto, la situación mejora algo en 2022 pero no lo suficiente. Los contratos de futuros descuentan una subida de casi el 10 por ciento en el S&P pero esta subida no sería suficiente para volver al nivel anterior a la crisis del coronavirus. Se quedarían casi un 20 por ciento por debajo de su nivel en 2019.
La recuperación a esos niveles no se produciría hasta finales de 2027, según los futuros. Y la historia es similar, o peor, en otros mercados. De esta manera, parece que todavía habrá que esperar mucho para volver a florecer a los dividendos de las cotizadas.