Cautela en Wall Street tras el fracaso de Gilead Sciences
Los tres principales índices de la Bolsa de Nueva York permanecen planos en la apertura, decantando la balanza ligeramente hacía las ganancias gracias al impulso económico de 500.000 millones de dólares
Wall Street mantiene la prudencia. A la apertura de las operaciones en la Bolsa de Nueva York sus tres principales índices permanecían planos, decantando la balanza ligeramente hacía las ganancias. Los inversores no se han achantado ante la ineficacia del antiviral contra el Covid-19 fabricado por Gilead Sciences, pero tampoco se muestran especialmente optimistas.
El Dow Jones crecía en torno al 0,2%, hasta los 23.557 puntos, impulsado por la petrolera Exxon, que se anotaba el 2,8% y la compañía de productos químicos Dow Inc, que ascendía el 1,6%. En cambio, por el lado contrario, Intel lideraba las pérdidas, con una bajada del 2,9%, seguida de Boeing, que se dejaba el 1,9%.
El selectivo S&P 500 aumentaba el 0,45%, quedándose alrededor de los 2.810 puntos, mientras que el índice Nasdaq retrocedía un 0,1%, en torno a los 8.481 puntos. La balanza de la semana de Wall Street permanece en números rojos.
Las bolsas se apoyan en la ayuda económica de 500.000 millones de dólares que aprobó este jueves la Cámara de Representantes de Estados Unidos. El proyecto de ley ahora está con el presidente Donald Trump, quien se espera que lo firme.
"En plena temporada de resultados empresariales, ahora se espera que los beneficios empresariales de las empresa del SP500 hayan caído un 14% en el trimestre y que los beneficios del sector energético caigan un 60% tras el desplome de los precios del petróleo", explica Sergio Ávila, analista de IG Markets. "Todo esto aumenta el temor de que haya despidos en las compañías petroleras, incumplimientos de deudas y posibles quiebras", añade.
Este viernes fue el turno de American Express en las presentaciones de resultados del primer trimestre. La firma de tarjetas de crédito anunció un beneficio neto de 367 millones de dólares, lo que supone un 76% menos respecto al mismo tramo del ejercicio anterior.
Los inversores esperan que, al menos, las malas cifras de las compañías impulsen la reapertura de la economía cuanto antes, aunque con medidas progresivas. La situación de la crisis sanitaria todavía es grave. Hasta la fecha, los Estados Unidos registran 869.172 casos positivos por el virus, al menos 49.963 muertes y unos 80.934 pacientes recuperados, según datos de la Universidad Johns Hopkins.
El petróleo sube por la tensión en Oriente Medio
La subida del petróleo alarga el rebote en el parqué neoyorkino. El crudo de Texas abrió este viernes con una subida del 4,85 %, hasta los 17,30 dólares el barril, tras cerrar la sesión del jueves con un repunte del 19,7 %. En la apertura, los contratos futuros para entrega en junio sumaban 0,80 dólares con respecto a la sesión previa del jueves.
Los inversores permanecen atentos a las jugadas geopolíticas de Donald Trump. La tensión en Oriente Medio ha subido después de que el magnate amenazara con destruir naves iraníes que hostigaran a embarcaciones de su país.
Los precios del oro negro suben de nuevo, no obstante, el mercado plantea los mismos problemas que antes del desplome: la incertidumbre por la falta de capacidad de almacenamiento de petróleo en todo el mundo y el exceso de oferta y escasa demanda a raíz de la crisis del coronavirus.
Si la producción continúa similar a los niveles actuales, la capacidad de acopio será nula entre la primera y la última semana de mayo.
En otros mercados, el oro subía a 1.754,70 dólares la onza, la rentabilidad del bono del Tesoro a 10 años ascendía hasta el 0,615 % y el dólar perdía terreno ante el euro, con un cambio de 1,079.
