Adiós a la racha alcista más larga de la historia

Los inversores de todo el mundo se encuentran prácticamente en estado de shock por el impacto que la crisis del coronavirus está teniendo en los mercados, asegura la revista INVERSIÓN en su número de esta semana, que se distribuye a través de Kiosko y Más, el mayor quiosco digital de España, y de Pressreader.

La volatilidad se ha disparado a niveles de la crisis financiera y nadie sabe exactamente qué dirección tomar, con todos los activos (también los de refugio) muy estresados ante la evolución de una enfermedad totalmente desconocida.

En este contexto de más interrogantes que certezas, lo único sobre lo que hay certitud en el mercado es que la racha alcista más larga de la historia ha llegado a su fin.

Así, un virus de origen desconocido surgido en una lejana ciudad de Oriente ha conseguido lo que ni la crisis de la deuda en Europa, ni la guerra comercial entre Estados Unidos y China, ni el Brexit lograron: poner fin a casi once años ininterrumpidos de subida de la renta variable (desde el 9 de marzo de 2009 hasta el 19 de febrero de 2020, cuando Wall Street tocó su último máximo).

Si bien, esta racha alcista no se ha vivido de igual manera en Estados Unidos que en el resto del mundo. En concreto, mientras que las acciones estadounidenses se agregaron un valor de 28 billones de dólares, la evolución de las compañías europeas (y españolas) fue mucho más mediocre.

«La gente tiene la sensación de no haber disfrutado el mercado alcista porque toda aquella cartera que no tuviera mercado americano no se ha beneficiado», relata en ese sentido Marta Campello, socia y gestora de Abante.

Es el caso de España, que ha vivido un comportamiento muy condicionada por el gran papel que desempeña el sector bancario (protagonista de diversos rescates y muy perjudicado por las políticas acomodaticias de los bancos centrales). De hecho, Bankia es el valor del Ibex que peor lo ha hecho en este periodo alcista, con un retroceso del 99%.