Luchar por el clima y ganar dinero
Edmond de Rothschild, Nordea y Federated Hermes ven en la gestión de activos una vía para impulsar la lucha a favor del clima
La industria de la gestión de activos abraza la inversión socialmente responsable, marcando una hoja de ruta ESG a tenor de la creciente demanda de los clientes. Principios que los inversores han ido adaptando cada vez más a sus carteras.
Para analizar su contribución y las oportunidades que ofrece, el Foro Social Investor contó con la presencia de representantes de tres prestigiosas gestoras internacionales Edmond de Rothschild, Nordea y Federated Hermes, con una amplia cartera de fondos en los que encontrar formas de canalizar sus inversiones.
«Tenemos muchas herramientas, y también deberes a la hora de seguir la hoja de ruta climática marcada en la COP 26», explicó Sebastian Senegas, head del Sur de Europa en Edmond de Rothschild.
La gestora apuesta por inversiones que «respetan los objetivos», excluyendo a aquellas compañías que se aparten de esa estrategia.
«En un primer nivel tenemos los indicadores ESG bien definidos; en el segundo, el ‘engagement’, trabajar con las empresas que quieren colaborar», dijo Carlo Fassinotti, responsable de marketing y experto en ESG de Nordea, cuya política es invertir en empresas «en fase de transición».
Carlos Capela, responsable de desarrollo de negocio y distribución de Federated Hermes, detalló que la gestora incluye una combinación de inversiones.
«Cada vez hay más empresas que luchan contra el cambio climático, pero históricamente no ha habido tantas», explicó. «Crea un universo mucho mayor el poder invertir en compañías cuyo objetivo no es el cambio climático, pero que se están interesando en cómo pueden contribuir. Ahí puedes implicarte con ellas, tratar de mejorarlas y hacer un camino muy a largo plazo», dijo.
Los inversores encuentran otra alternativa en la denominada deuda verde, una modalidad de bonos que cada vez más empresas -y gobiernos- empiezan a llevar a cabo.
«Para los emisores es interesante porque hay mucha demanda. A las empresas les pasa un poco lo mismo, hay una prima verde. Es una forma de obligar a la compañía a cumplir con lo que dice y a ser más responsable al anunciar sus compromisos», detalló Carlos Capela.
A pesar de que la emisión de este tipo de deuda es un paso importante para la industria, no está exenta de riesgos. Entre ellos, el de que se produzca una burbuja verde en este tipo de inversiones.
«Es la pregunta del millón. Todos los estudios demuestran que las empresas que tienen la mejor nota en inversión socialmente responsable son las que mejor resultado han dado a lo largo de los últimos 10 o 20 años, e incluso durante la pandemia», valoró Sebastian Senegas.
Reconoció, además, que las empresas que se han volcado en este apartado tendrán muchas más oportunidades de negocio frente a aquellas que aún no han tomado posiciones.
«En el futuro ya no hablaremos de burbuja cuando toda la industria sea ESG», explicó el representante de Edmond de Rothschild. Temores que también alejó Carlo Fassinotti. «Habrá un tiempo de consolidación, pero no creo que vaya a haber una burbuja», apuntó. En torno a oportunidades concretas de inversión, son variadas.
Dónde invertir
Sebastian Senegas recordó que Edmond de Rothschild lanzó hace un año ‘Green New Deal’, un fondo de artículo 9, la mayor nota en cuanto a criterios ESG que concede la regulación europea.
«Son empresas líderes ahora, volcadas hacia el cumplimiento. No solo empresas que cumplan ‘a rajatabla’ con los objetivos, sino las que evolucionan a favor de ello», detalló.
Mencionó, además, una apuesta de futuro, la denominada ‘green tech’ o tecnología verde, de la que «se hablará mucho».
«Tenemos un artículo 9 que busca compañías que generan impacto a través del servicio que ofrecen», dijo Carlos Capela. Este fondo, Impact Opportunities Fund de Federated Hermes, cuenta con 32 compañías y cumplirá cuatro años en diciembre.
«Tiene una parte en transición energética, otra en salud y bienestar, como el tratar pandemias como la diabetes, pero también partes en la gestión de residuos, del agua y en servicios financieros», explicó el experto.
En cuanto a Nordea, Carlo Fassinotti destacó uno de los fondos de la gestora, Global Climate and Environment. «Creo que faltan soluciones de este tipo. Es una combinación entre cambio climático y social. La parte social nos importa muchísimo, por primera vez en nuestra encuesta paneuropea era una de las temáticas más importantes», reveló