Disyuntiva técnica, continuación o rebote

Las bolsas están mostrando un comportamiento direccional divergente, asimétrico, y las americanas siguen manteniendo su estructura de avances en el ejercicio en tanto que las europeas incrementan los signos de debilidad. Quien acabará por llevarse el gato al agua no está claro en este momento. Las plazas europeas han visto atacado niveles de soporte más significativos y, por ahora, los tímidos rebotes que han mostrado en los mismos no han sido confirmados superando niveles de validación. Por tanto, hay opciones de tener patrones de continuación que acelerarían las correcciones hasta la siguiente zona de soportes, ya más significativas. Y ello sería más fehaciente si los índices americanos frenan su escalda, que por ahora sigue local y ajustada a los resultados.

La sobreventa que comienza a acumularse en las plazas europeas puede ayudar a que se mantengan estos primeros niveles de soporte. Pero la situación es frágil. La presión sobre el sector bancario, agraviada por la situación del banco luso Espito Santo, que se contrapone a los resultados del Citigroup, que ayer favorecieron los avances en las plazas americanas, es también una amenaza que puede provocar las rupturas de estos soportes. Y como tenemos que el sentimiento está muy variable, podría ser el desencadenante de una corrección mayor si por cualquier motivo flaquearan los selectivos americanos. Los riesgos geopolíticos también siguen presentes y la temporada estival es propicia a los movimientos bruscos en cualquier dirección, normalmente auspiciados por los menos volúmenes que os habituales. Por el momento, las alertas están ahí y las referencias se han de seguir de cerca para promover cambios tácticos o estratégicos llegada la ocasión. Hoy, Yellen toma el relevo a Draghi en cuanto discursos, de momento el de ayer del italiano no tuvo mayores consecuencias, aunque lanzaba avisos a navegantes respecto al tipo de cambio del euro y al freno a las operaciones de "carry trade" de la banca con la deuda pública.

El dólar, a pesar de las palabras de Draghi, que sigue buscando una depreciación del euro frente al billete verde, no se salió del rango de las últimas jornadas, y sigue con los mismos niveles de referencia. El dólar aguanta los soportes en la zona 1,3600, que hoy está atacando y quedando en rango entre esta zona y la primera resistencia proporcionada por la media móvil de 200 sesiones, sobre los 1,3670, que son los que marcan las referencias para poder tener mayores movimientos direccionales. Los niveles para las confirmaciones al alza sería la superación de los 1,3700 y el nivel de los 1,3550, para buscar la confirmación de mayores apreciaciones, pasando el siguiente filtro en la zona de los 1,3500.

El SP500 vuelve a quedar en situación de poder atacar la zona de los 2.000 puntos, necesitando una nueva consolidación y superación de los 1.980 puntos, de los que se ha quedado ya muy cerca de nuevo en cierre. Ha aguantado la primera zona de soporte débil, entre los 1.960-1.950 puntos, de la que vuelve a alejarse repitiendo el comportamiento mantenido por ahora en el ejercicio. Los osciladores de corto plazo pueden dar señales de giro, al alza, desde la zona de lecturas de neutral, y favorecer la confirmación del nuevo impulso. El cierre fue con un avance del 0,48%, para acabar en los 1.977,1 puntos.

Los niveles de soporte continúan con la referencia débil sobre los 1.960-1.950 puntos, con la proyección de la última aceleración como apoyo, ya algo por encima de este nivel más alto, sobre los 1.950 puntos, y después mantenemos la zona que tenemos como primer soporte, algo más relevante en los 1.920-1.900 puntos. Se refuerza el nivel anterior sobre los 1.880 puntos, con el apoyo ahora de la proyección de actual directriz de avance en este nivel. Después se mantiene el nivel de los 1.830-1.800 puntos como soporte más relevante, también apoyándose con la proyección de la media móvil de 200 sesiones, que se coloca sobre 1.838 puntos con una nueva aceleración de su pendiente.

Luego están ya los 1.750-1.740 puntos, si se pierden estas referencias se marca la entrada en rango lateral y quedaría en sesgo más negativo la zona de los 1.700 puntos. El siguiente nivel de soporte, en los 1.680-1.660 puntos, la extensión del mismo hasta 1.650 puntos, respetando el ajuste con los últimos mínimos significativos de octubre del pasado año, que es el que supondría amenazar también la continuidad del escenario lateral. Después tenemos la zona de soporte en los 1.600-1.580 puntos, que volverían activar los escenarios de entrada en posible corrección y que no son nuestra apuesta, pero que significarían ir buscando niveles teóricos de retroceso, primero en la zona de los 1.500 puntos, y con posibles proyecciones hasta la zona de los 1.400-1.370 puntos, si fuera con mayor intensidad. Por ahora, este escenario sigue contando con bajísima probabilidad de ocurrencia, y el sesgo es positivo a medio plazo, sólo perdiendo los 1.700 puntos, que comenzaría a poder contarse con él como opción.

Atacado el objetivo de los 1.980 puntos, a falta que se muestre su consistencia para asaltar a la cifra redonda de los 2.000 puntos, que supone buscar un registro más acelerado dentro del movimiento actual, que seguramente volvería a suscitar las dudas y temores y hacer pensar en nuevas pruebas de soportes. Se mantiene este como escenario más probable la continuación de los avances, hasta estos niveles, para buscar alguna consolidación más importante, y buscando un factor que pueda desencadenarlo, sin descartar sorpresas geopolíticas. Por ahora, la prueba a la zona de soporte débil mantiene las expectativas de este escenario, y que incluso viendo al zona de los 1.950 puntos aguantando, mantendría las opciones inmediatas del impulso. La temporada de resultados es un buen aliciente para los incrementos de volatilidad.

El Ibex cerró con avances, situándose por encima de forma testimonial de los 10.600 puntos, con ese aspecto importante, por ahora, de no perder los 10.500 puntos. No fue el mejor dentro de al eurozona, superado de forma amplia por otros índices, y se sigue viendo mucha debilidad, sobre todo, por el sector bancario. Pesa mucho el tema del BES, y pasa factura al selectivo, que hoy también da síntomas de debilidad y puede seguir buscando soportes con el riesgo de que pueda completar un patrón de continuación. Los rebotes, por ahora, siguen sin validarse, también con pocas pistas por los volúmenes negociados. Cierre próximo a la apertura en zona de altos, pero después de ver bajos mayores es síntoma de dudas. Los osciladores de corto plazo ya están en la zona de sobreventa, con opciones de giro, al alza, si se logran respetar las zonas de soporte. Cerró la sesión con un avance del 0,64%, para acabar en los 10.606,30 puntos.

Los 10.700 puntos son la primera referencia de resistencia para validar cualquier impulso que podamos tener sin haber perdido los soportes. Después, la recuperación de la directriz de avance acelerada, perdida sobre los 10.850 puntos. Después sigue el hueco dejado sobre los 11.085 puntos, que se ha cubierto parcialmente, y actúa como primera resistencia clave a superarse y poder validar la aparición de nuevos impulsos. Se queda pendiente de nuevo el ataque al rango, proyectado en los 11.200-11.250 puntos, que ya no se han podido superar a la primera, porque son una confluencia importante de varios niveles de resistencia. Si se logran romper de forma consistente, ya tenemos referencias en los 11.500 puntos para, finalmente, situarnos en la zona de los 11.800-12.000 puntos, y aproximarnos al objetivo teórico marcado. Por ahora se han mantenido los soportes claves, que nos respetan la vigencia de la figura de vuelta mayor y que nos deja como objetivo teórico, a medio plazo, la referencia de los 12.000-12.500 puntos.

Se aguanta todavía como referencia la zona de los 10.500 puntos, que ha cedido en los mínimos intradiarios en las últimas sesiones, y cuya pérdida abre la búsqueda a la referencia de los 10.300 puntos, y al siguiente rango, hasta los 10.000 puntos, dónde se proyecta la directriz de avance actual. La media móvil de 200 sesiones, en los 10.168 puntos, apoya el soporte de esta zona. Perder estas referencias comenzaría a complicar el panorama a corto plazo. Lo soportes a vigilar, el primero, en los 9.900-9.850 puntos de los mínimos anteriores. Después ya está la zona del hueco dejado sobre los 9.530 puntos, y para mantener sano el escenario a largo plazo, ha de aguantar en el rango de los 9.400-9.250, en caso de retrocesos importantes, sino ya nos volvemos a colocar dentro de un lateral.

Los 9.000 puntos quedan en zona de atracción por cifra redonda, pero sin relevancia técnica a priori, usando la extensión a la zona de los 8.800 puntos que, de perderse, son los que se encargarían de anular opciones impulsivas y nos marcaría un posible sesgo negativo dentro del lateral atacando los 8.200-8.000 puntos. Después tenemos referencias en los 7.700-7.500 puntos, que nos cambia el escenario a correctivo. Siguen las bajas probabilidades asignadas al escenario correctivo, que sólo comenzarán a incrementarse si se pierde la zona clave de los 9.500 puntos, de la que seguimos alejados, en tanto que un apoyo a los 10.000 puntos, aunque generaría dudas podría sanear el avance acumulado.