El desbarajuste europeo deja más opciones para una nueva corrección
Los titulares vuelven cargados de pánicos, abismos y catastróficos epítetos para una corrección en las bolsas que volvió a ser de las habituales en las últimas semanas, incluso inferior a otras muchas de las vividas. Hoy parece que va a volver tocar corrección, al menos de apertura por como viene todo, porque los tempos políticos siguen sin ajustarse a los de los mercados que siguen muy nerviosos. Pero veremos cómo acaba.
El ataque a los bonos italianos fue de órdago y la presión se mantiene en la apertura. Se comienzan a barajar nombres para la sustitución inmediata de Berlusconi, entre ellos el de Mario Monti, para crear un gobierno de tecnócratas que permita la aplicación inmediata de las medidas propuestas por la UE acordadas el pasado 26 de octubre que el propio Berlusconi proponía.
Pero todo ello lleva tiempo, ya vemos que en Grecia tampoco se ponen de acuerdo los políticos con sus "sillas". Se oyen voces de crear dos UE, con núcleos duros y países periféricos. Otra vez más globos sondas, noticias, rumores y desmentidos oficiales y oficiosos que van a generar volatilidad y desconfianza. El paso de la euforia al pesimismo en apenas horas o días sigue como característica con la que hay que seguir conviviendo. Pero lo cierto es que el escenario es muy preocupante por la gran cantidad de incertidumbres que se genera y la incapacidad manifiesta de nuestros dirigentes para disiparlas con acciones, planes y hojas de ruta viables y creíbles necesarias para devolver la confianza y que los propios mercados se conviertan en una parte de la solución a la crisis y no en un problema más añadido.
Técnicamente, la situación se complica de nuevo. Se atacan niveles claves que nos han provocado que vuelvan a ganar opciones los escenarios correctivos si vamos a buscar las zonas de mínimos y se pierden esas referencias. En este momento estaríamos con luz ámbar en las bolsas parpadeando y avisando de que habrá que estar preparados por si hay que cambiar a rojo.
El dólar perdía ayer el nivel de soporte de los 1,3600 y deja el camino abierto para atacar la zona de los 1,3400 y poner en aprietos a los niveles de los mínimos de octubre sobre los 1,3200. Como se sigue manteniendo la correlación ello conlleva caídas para la renta variable. Ahora, los 1,3600 pueden actuar como resistencia intradiaria y gana en fuerza la zona de los 1,3800-1,3850 como primer nivel importante a superar para retomar sensaciones positivas y volver apoyar rebotes y avances.
El SP500 cerraba en los 1.229,10 puntos tras haber iniciado la sesión a la zona de máximos por encima de los 1.270 puntos. El índice ha vuelto quedar frenado de la media móvil de 200 sesiones que se proyectaba en torno a esos niveles de máximos y sin superar tampoco la proyección de la línea clavicular que había marcado el proceso de corrección. Y además nos puede dejar una formación de doble techo que unida a los indicadores de momento en negativo que se han dado la vuelta puede llevar implícitos más recortes si acaba por confirmarse.
Perder estos niveles nos apunta a objetivos en torno los 1.000-980 puntos. Para superar esta situación los rangos son cambiado hay que romper al alza la zona de los 1.270-1.300 puntos con un buen apoyo de volumen, y en tanto ello no se produzca hay que seguir vigilantes.
El Dax alemán cerraba en los 5.829,54 puntos, después de iniciar la sesión en máximos por encima de los 6.050 puntos. De momento se respeta la zona de los 5.800 puntos, que consideramos clave para no seguir con las correcciones, pero nos aparece una preocupante formación de giro de hombro cabeza y hombro secundaria que sí se pierden estos niveles puede quedar confirmada. Para ello, extenderíamos la zona de posible soporte a no perder hasta los 5.650 puntos. Desde ahí el objetivo de la figura sería volver otra vez a la zona de mínimos en torno los 5.000 puntos. Probablemente las bolsas no están corrigiendo más a la espera de que se produzca alguna intervención que de pistas hasta dónde puede llegar la situación en la tensión de la deuda italiana. Pero si ésta se sigue deteriorando las intervenciones no estarán para frenar las ventas.
El Ibex35 cerraba en los 8.340 puntos, por debajo de los 8.400 puntos que nos marca vamos como referente máximo para mantener la tranquilidad. Ahora, el siguiente soporte está la zona de los 8.200 puntos antes de pasar atacar la zona de los 8.000 puntos que es el último bastión a defender para no volver a buscar los mínimos dentro del lateral que son los que nos marcan la entrada en una fase bajista. Esta zona de mínimos sigue delimitada entre los 7.800-7.600 puntos y de perderse nos lleva hasta buscar objetivos en la zona de los 7.200-7.000 puntos antes de los mínimos de 2009 en los 6.700 puntos.
Hasta que no superemos la zona de los 9.200-9.400 puntos, no estamos en condiciones de pensar en alcanzar el objetivo de salida al alza del lateral que se encuentra en los 9.800 puntos y con la media móvil de 200 sesiones actuando como resistencia previa en torno los 9.700 puntos. Los escenarios alcistas se alejan y para ello se han de superar primero los 10.000 puntos y extender los avances hasta los 10.500 puntos con buenos los apoyos de volumen.
