El poker del mentiroso de Papandreu salpicará todo hasta que se despeje la incógnita
Ayer fue otra jornada de volatilidad extrema en el mercado, desde los inicios que mostraban caídas importantes tras la reunión de Merkel y Sarkozy, donde se negaba la ayuda a Grecia, hasta el resultado del referéndum, para acabar con alzas al conocerse la noticia de la retirada (por ahora en condicional) de la consulta y la bajada de tipos del BCE de Draghi. El pocker del mentiroso al que está jugando Papandreu en clave de política interna está pasando factura en forma de credibilidad que acaba salpicando a todo. Y seguiremos a expensas de esta situación hasta que no se confirme definitivamente cuáles son las decisiones tomadas. Y todo ello repercute en el gran problema de Italia, donde también podemos tener movimientos políticos a corto plazo y que es por ahora el foco más grande de tensión para los mercados.
La bajada de tipos del BCE sentó bien a los mercados ayer. Las dudas sobre las medidas continuistas o no en el discurso del BCE, tras su cambio de presidente, se disiparon. Es cierto que probablemente la medida la iba a tomar Trichet en su última intervención, pues los datos de control de la inflación están ahí y la ralentización del crecimiento económico de la eurozona es evidente. Pero el que se deje abierta la puerta a mayores bajadas antes incluso de final de año si que puede generar buenas expectativas.
Ahora tenemos la reunión del G20, en donde hay que vislumbrar claves para que pueda reactivarse la economía, sino es imposible salir de esta situación. Para aderezar la jornada, contamos también con el dato de la tasa de paro en Estados Unidos, que no tiene buenas perspectivas futuras a tenor de los comentarios de Bernanke. El cierre semanal volverá a ser importante para ver cómo queda la situación técnica, a la que los vaivenes de las últimas jornadas están complicando la concreción de los escenarios y su asignación de probabilidades.
El dólar continuó depreciándose ayer pese a la bajada de tipos y se sitúa sobre los 1,3800. No tenemos por tanto cambios en los niveles significativos que nos apoyan la posible evolución de las bolsas. La zona de resistencia importante está en los 1,3900 con la extensión hasta los 1,4000, si se superar las bolsas vuelven a colocarse con opciones de proseguir con los avances a los objetivos de salida de los laterales. Si por el contario se pierde el soporte de los 1,3600, se activan objetivo en la zona de los 1,3400 y se vuelven a incrementar las opciones de entrar en escenarios correctivos y de búsqueda de soportes.
El Dow Jones cerraba en los 12.044,47 puntos, recuperando la psicológica cota de los 12.000 puntos y consolidando el punto de rebote desde la banda alta del rango de resistencia. Ciertamente, los volúmenes no son muy importantes y habrá que ver la reacción de hoy a partir del dato de empleo.
Para tranquilizar la situación, es clave que logre consolidarse primero por encima de estos 12.000 puntos en cierre semanal y que el siguiente ataque la zona de la línea clavicular sea con resultado positivo por encima de los 12..300 puntos. En estas condiciones se daría la situación de poder buscar el siguiente rango objetivo que tenemos comprendido entre los 12.500 y los 12.800 puntos, que sentencia prácticamente la condición de suelo que habríamos efectuado en los mínimos de octubre.
Pero en tanto esto no suceda, no podemos descartar el escenario correctivo. El primer paso para incrementarse las probabilidades de ocurrir esta situación estaría en la entrada de nuevo dentro del lateral, aunque para ello debería perder ahora el soporte de los 11.700 puntos y la zona clave de los 11.500 puntos. La entrada dentro del lateral conllevaría vigilar la zona de soporte de los 11.300 puntos.
Para comenzar las preocupaciones se incrementarían con la pérdida de los 11.000 puntos al dejar abierta entonces la posible prueba de la banda baja del lateral que tenemos entre los 10.700-10.600 puntos. De perderse estos mínimos, nos introducimos el escenario bajista con el objetivo de corrección a la zona de los 10.000-9.800 puntos. La quiebra desordenada de Grecia y una mayor presión sobre Italia y España nos puede llevar a este objetivo.
El Ibex 35 cerraba en los 8.712,6 puntos, tras el inicio de la jornada por debajo del nivel de los 8.500-8.450 que tenemos marcado como clave para no complicar el panorama corto plazo. Que se mantenga este nivel sigue siendo importante para no perder las opciones impulso de superar nuevamente al alza el techo del rango lateral.
Si perdiéramos esta zona de soporte se volvería buscar la referencia primero en los 8.300-8.250 puntos y posteriormente en los psicológicos 8.000 puntos. La banda baja del soporte se mantiene la zona de los 7.700-7.600 puntos, que no deben perderse para mantener el escenario de corrección bajista medio plazo que sigue contando con opciones de poder ocurrir.
Perder estos niveles nos activa las zonas de los 7..200-7.000 puntos, como objetivo antes de los mínimos de 2009. Para intentar descartar esta situación ahora primero nos enfrentamos a corto plazo la zona de resistencia de los 8.800 puntos que se extiende en un rango hasta cerrar el hueco dejado el lunes en torno los 9.000 puntos. Aquí necesitamos cierres semanales por encima de este nivel y con opciones de atacar los anteriores máximos entre los 9.200-9.400 puntos para sentar las bases de anular las opciones de este posible escenario bajista y haber dejado atrás el suelo. Lo conseguiríamos superando la zona de los 9.800 puntos, que es el objetivo de salida del lateral, y con ataques con apoyo de volumen a la zona de los 10.000-10.200 puntos.
La directriz bajista que aún prevalece dominando el movimiento está sobre los 10.500 puntos y por ahora lejos en las condiciones actuales de mercado pero será la ruptura de la proyección de la misma, con un buen apoyo de volumen, la que nos permita entrar en escenarios positivos a medio plazo.