Ibex: Con la puerta en las narices
Así de gráfico puede relatarse el intento de ruptura por parte del selectivo español a los máximos del mes de[…]
Así de gráfico puede relatarse el intento de ruptura por parte del selectivo español a los máximos del mes de diciembre en los 9.262 puntos. Ya comentábamos el pasado viernes que es muy poco probable que esto ocurra al cuarto intento. No obstante, no está todo perdido puesto que lo realmente importante ahora es que no nos alejemos mucho de dicha zona. De hecho, tenemos la tendencia alcista ligeramente por debajo de los 9.100 puntos y es precisamente esa zona la que nos indicaría que hay ganas de retroceder y dar definitivamente por perdido este ataque con el consiguiente deterioro que podría realizarse si rompemos la simetría con el primer hombro desarrollado entre finales de octubre y noviembre.
Por ello, la esperanza mientras que no se pierdan los 9.100 puntos sigue intacta, pero mientras esperamos la media móvil de largo plazo (color negro) sigue con su descenso y muy pronto se unirá a la muralla china que se está creando en los 9.262 puntos, nivel que con una precisión milimétrica fue rechazado en la sesión de ayer dejando una vela correctiva (vela negra) fea a la que debemos estar muy atentos para valorar su continuidad ya que dejar la sesión de hoy con una vela alcista (vela blanca) despejaría mucho los temores de inicio de una corrección más duradera con el fin de realizar un segundo hombro simétrico respecto al izquierdo.
Ante este escenario, acabaríamos viendo cómo se pierden los 9.100 puntos para irnos a la zona en torno a los 8.650 puntos y desde ahí organizar el ataque definitivo a la gran muralla china de los 9.262 puntos en el plazo de un mes. Realmente un escenario por el que ningún inversor que está comprado quiere pasar, de ahí que siga confiando en el soporte de los 9.100 puntos y la tendencia alcista aunque no por ello pueda llegar a negar las evidencias en caso de pérdida de dicho nivel. El riesgo a asumir ante este escenario de pérdida de los 9.100 puntos es elevadísimo, máxime cuando no tenemos garantía alguna de que el soporte de los 8.650 puntos sea efectivo.
Pero no hay que adelantarse a los acontecimientos. De momento, lo único que tenemos es la nariz un poco roja del golpe de ayer pero sin ningún efecto secundario.