Ibex: Niveles clave para mantener el escenario alcista

Las bolsas europeas no dejan de mirar lo que sucede al otro lado del Atlántico como es habitual y, realmente, cuesta mantener el desacople durante muchas sesiones aunque éste sea de baja intensidad. Ayer, se daban movimientos bruscos en el mercado ante los rumores sobre el posible acuerdo en la elevación del techo de deuda y, con sus desmentidos o declaraciones, se sucedían los vaivenes. 

Al final, pesaron de forma generalizada los desacuerdos y los números rojos fueron mayoría, con mayor mayor intensidad para las plazas americanas. Los índices del país se acercan a niveles técnicos que siembran dudas sobre la aparición de patrones de techo que apuntarán a mayores correcciones si acaban de confirmarse. 

Sin el riesgo geopolítico de Siria, frenado por el momento tras la solución del desmantelamiento de su arsenal químico de forma controlada, el tema local estadounidense en sus dos vertientes, la del techo de deuda y la retirada de estímulos, es sobre la que se pueden desencadenar estas correcciones. Si bien, las sobreventas comienzan a ser importantes y coinciden con el inicio de la temporada de resultados. 

Si viene bien, puede ser el aliciente con el que se frenen estos retrocesos. Por ahora, los mercados de deuda están bajo control y ésta se considera también una amenaza importante a controlar que pasaría aun más factura de forma global. En esta situación, la exposición a retrocesos para consolidar los avances está ahí, de momento sin indicios de fortaleza sobre los mismos que hagan pensar en un cambio de tendencia de fondo desde la perspectiva técnica. Pero pueden frenar la entrada de liquidez a la renta variable cómo alternativa.

El dólar no logró situarse de nuevo por encima de los 1,3600 y sigue con la digestión del último estirón que ha sido menor que el anterior, mostrando algo más de agotamiento en su debilidad y parece que comienza a corregir la sobrecompra alcanzada aunque no buscado por ahora soportes claves.

Las bolsas asiáticas al compás de una mejora en los futuros nocturnos americanos presentan moderados avances que pueden reproducir este comportamiento en la apertura europea, que seguirá sin duda bajo los mismos parámetros de la sesión de ayer, con la referencia en las plazas americanas aunque haya para hoy más datos macroeconómicos a tener en cuenta.

El dólar no volvió a atacar de forma consistente el nivel de los 1,3600 y tuvo una jornada de rango estrecho en la que tampoco probó sus zonas de soporte quedando dentro del rango de la última sesión aunque más sobre la zona de bajos de ésta. De momento, la jornada en Europa se inicia igual y por tanto se mantienen sin cambios las referencias técnicas importantes.

Mantenemos la zona de los 1,3500-1,3470 como primer soporte débil y se refuerza el nivel de los 1,3200-1,3100, que son el primer soporte más significativo reforzándolo con la media móvil de 200 sesiones lateral situada sobre los 1,3184. El siguiente nivel de soporte está en los 1,3000 y, si se pierde, tenemos como nivel clave el nivel de los 1,2800.

Los 1,3600 son la primera zona de resistencia hasta que no se supere de forma consistente. Si los supera, el siguiente objetivo está en la zona de techos del canal en los 1,3750-1,3800, que son los máximos que se alcanzaban a principios de ejercicio. De superarlos, dejarían paso a la posible búsqueda de zonas sobre 1,4000-1,4100 en niveles de 2011.

El SP500 inició la semana en número rojos perdiendo más de lo avanzado el viernes pero sin  marcar nuevos mínimos respecto a la semana anterior que lo llevarían ya a buscar la zona de apoyo de actual directriz de avance ajustada. Los osciladores de corto plazo se aproximan a las zonas de lectura de sobreventa que pueden ayudar a que se respeten estos niveles y volver a interrumpir la amenaza de un patrón de vuelta que pronunciaría más los retrocesos. Cedió un 0,85 % para acabar en los 1.676,12 puntos atacando la zona de soporte en la corrección de la última hora de la sesión.

Estamos dentro del primer nivel de soporte débil en los 1.700-1680 puntos, que se refuerza la proyección de la directriz de avance como soporte sobre los 1.670-1.660 puntos respetando el ajuste con los últimos mínimos significativos. Después, tenemos la zona de soporte en los 1.600-1.580 puntos que cuenta con la proyección de la media móvil de 200 sesiones sobre este nivel como apoyo en los 1.597 puntos. Niveles por debajo volverían activar los escenarios de entrada en posible corrección que aún no son nuestra apuesta pero que significarían ir buscando niveles teóricos primero en la zona de los 1.500 puntos y con posibles proyecciones hasta la zona de los 1.400-1.370 puntos si fuera con mayor intensidad.

El objetivo tocado de los 1.725 puntos, no superado y ya en la búsqueda una primera prueba a soporte, se mantiene este nivel como zona de resistencia, con ahora el nivel de los 1.700 puntos como zona a superar para validar cualquier rebote que pueda propiciarse por la sobreventa o por la prueba con éxito de los soportes. El siguiente nivel de objetivo se proyectaría sobre la zona de los 1.740-1.750 puntos con una posible extensión hasta la zona de los 1.760 puntos. Después de estas referencias ya nos quedan los 1.800 puntos pero pasando por esta digestión de avances antes de lograrlos.

De momento, mantenemos el escenario de la tendencia de fondo alcista y no se verá en situación comprometida si no hay ataques a la zona de los 1.600 puntos. La incertidumbre del techo de deuda y el inicio de la retirada de estímulos serán los que marquen las opciones de que pueda o no atacarse este nivel y comprometer los avances.

El Ibex 35 retrocedió sin atacar la zona de máximos de la sesión anterior y sin atacar la zona de mínimos del viernes, dejando un patrón de indefinición con ciertos visos de debilidad que se redujeron algo al cierre. La zona de resistencia actual es muy importante y puede ser difícil de superar sin acompañamiento del resto de plazas por las implicaciones técnicas que deja a largo plazo y por tanto es fácil que necesite tornarse un buen respiro para consolidar su ataque y posterior superación en el contexto de incertidumbres en que nos encontramos. Cerró con un retroceso del 0,41% y acabó en los 9.381,90 puntos cediendo por poco la zona baja del rango de resistencia que sigue en entre los 9.400-9.500 puntos.

Hoy, mantenemos sin cambios la primera referencia de soporte débil sobre los 9.150-9.000 puntos y el primer nivel de soporte importante en el rango de los 8.800-8.600 puntos, que si pasamos en los siguientes avances de los 9.500 puntos de una forma consistente quedará como una referencia clave en las típicas rupturas al alza del Ibex, y que entonces no deberían volver a perderse para no debilitar las opciones del escenario positivo a medio plazo. Nos mantenemos lejos del soporte clave por ahora en los 8.350-8.250 puntos, que cuenta con el apoyo de la media móvil de 200 sesiones que se sitúa sobre los 8.378 puntos y con pendiente positiva, hasta que no se superen de forma consistente los 9.500 puntos que nos cambian la referencia importante. Después, tenemos la zona de los 8.000 puntos que, de perderse ,son los que se encargarían de anular opciones impulsivas y nos marcaría la entrada en escenario lateral. 

Por debajo, tenemos la referencia en los 7.800-7.600 puntos, que nos sesgarían este lateral a la baja. El sesgo direccional variaría a negativo si se pierde esta zona y apuntaría ya hacia el soporte de los 7.200-7.000 puntos. Nos seguimos alejando de las opciones de los escenarios correctivos que presentan una escasa probabilidad de ocurrencia, pero hasta que no se confirme el patrón de vuelta superior tenemos que seguir teniendo en cuentas estos niveles clave que nos anulan el escenario positivo.

Seguimos con las zonas resistencia de los 9.400-9.500 puntos, que dan la continuidad a un escenario alcista a medio plazo si finalmente se superan de una forma consistente. Pero no hay que descartar que, para ello, necesiten probarse los soportes de forma previa para validarse definitivamente en su superación. 

Por el momento, es por el escenario que nos decantamos si se logran superar finalmente los 9.500 puntos, ya que entonces se puede proyectar una figura de vuelta de suelo mayor en puntos y en plazo temporal que cambiaría de forma significativa las proyecciones a largo plazo para el Ibex. El objetivo teórico de confirmarse el patrón de giro va más allá de los 12.000 puntos. Este es el escenario más positivo, pero que aún se ha de completar y si coincide su confirmación con el cierre del ejercicio los avances hasta el primer trimestre del próximo año pueden ser significativos.

La prima de riesgo la evolución de la rentabilidad de la deuda y su impacto en el sector bancario siguen como claves para lograr que se active la opción, que tampoco podría llevarse a cabo si no cuenta con apoyos del resto de selectivos. Las miradas en los patrones de techo de las plazas americanas que pueden aguar este escenario si se acaban cumpliendo y que aquí nos dejan con la posible aparición de una cuña ascendente como posible pauta correctiva que nos dejaría sin embargo un menor recorrido y con opciones de continuar de forma impulsiva, ya que podría quedar frenada en su objetivo teórico sobre los 8.500-8.200 puntos sin ir a mayores.