Jornada sin marcar cambios de fondo. Fase de digestión

Cierres mixtos en la sesión de ayer con presión para las bolsas periféricas, que acabaron también con mínimas dudas en las bolsas americanas.

Cierres mixtos en la sesión de ayer con presión para las bolsas periféricas, que acabaron también con mínimas dudas en las bolsas americanas. La jornada, con pocos datos de referencias y mínimas declaraciones, seguía con la discusión aparecida a raíz de declaraciones de miembros de la Fed sobre la necesidad o no de frenar las facilidades monetarias. Así que se trasladará a la lectura de las actas de la propia Fed el estado de la situación, y si puede pasar algo de factura a las bolsas. De momento las fuertes siguen en zonas de máximos históricos a pesar de las dudas que han podido surgir en la propia sesión de ayer que se sitúan dentro de la normalidad en la actuación de las bolsas.

Se mantiene la presión por la sobrecompra acumulada y aparecen divergencias, pero nada se refleja de forma significativa, por el momento, en los precios. Así que el diagnóstico técnico se mantiene, con una tendencia de fondo alcista con más dudas en las bolsas débiles y siguiendo de refilón al sector bancario en Europa para tener confirmaciones sobre las mismas. El dólar se mantiene en la banda baja de soporte, sin atacarlo en este caso por la sobreventa que se acumula, pero no se observa tampoco ansia de rebote que diera apoyo adicional a la renta variable, que se sitúa más en fase de digestión.

La jornada de hoy vuelve a estar exenta de datos macroeconómicos importantes, y puede seguir por los mismos derroteros que ayer, contiuando los procesos de digestión de los fuertes avances del viernes a última hora.
El dólar se mantuvo sin atacar la zona de los 1,2800, que había probado el viernes, y lograba buscar la zona de latos sobre los 1,2880, pero, por el momento, sin atacar de forma definitiva el nivel de los 1,2900 que, al ser soporte perdido, se convierte ahora en zona de resistencia débil en estos primeros envites. Este nivel puede probarse en la sesión de hoy, a tenor que los osciladores de corto plazo giran desde la zona de sobreventa y pueden propiciar el rebote; veremos si hay fortaleza para ello. La media móvil de 200 sesiones refuerza ahora la resistencia en la zona de los 1,3000, que es más significativa para validar cualquier tipo de avance. 

Sin cambios pues en la zona de resistencia tras esta primera débil de los 1,2900, que sigue vigente la zona de los 1,2950-1,3000 y que se va reforzando. Tenemos activa la zona de los 1,3200, que si supera de forma consistente, el siguiente objetivo ya se situaría en la zona de los 1,3400-1,3500 para recuperar el impulso y proyectar un mayor movimiento direccional. La vigilancia se mantiene sobre el nivel de soporte de los 1,2800-1,2700 como primera referencia fuerte, y es la zona que marca la pérdida de las opciones impulsivas al sesgar el lateral, a la baja, si finalmente cede con cierto patrón amenazante, que sería de continuidad correctiva, no tanto de giro como nos tiene habituados. El siguiente objetivo ya iría a buscar la zona de los 1,2500-1,2400, y de ahí ya volveríamos a entrar en zona correctiva con la mirada puesta en los 1,2200-1,2000.

El SP500 cerró con recortes testimoniales tras haber marcado nuevos máximos históricos intradiarios. Se dejó un 0,07%, para acabar cerrando en los 1.666,29 puntos. Mantenemos el escenario de avances, a pesar de continuar las presiones por el lado de la sobrecompra en los osciladores de corto plazo, con opciones de ver antes de los recortes el ataque a la zona de los 1.700 puntos. Los siguientes objetivos los proyectamos hasta la zona de los 1.680 puntos y, posteriormente, ya en los 1.700 puntos, que supondrían extenderse más allá del canal acelerado actual y buscar la antigua proyección de techos, que arrancaba en la zona de mínimos del año 2009.

Ajustamos el soporte débil sobre los 1.635 puntos, y reforzamos hasta la base del canal acelerado actual, como soporte los 1.600-1.585 puntos, y aguantamos la referencia de soporte sobre los 1.545-1.535 puntos para un primer retroceso más significativo. Continúa la proyección del soporte más fuerte en los 1.500-1.480 puntos, para no perder opciones en el impulso acelerado, que se refuerza al acercarse ya la proyección de la media móvil de 200 sesiones sobre los 1.475 puntos. Perder este nivel sí que nos colocaría en lateral con otra referencia de soporte en la zona de los 1.400 puntos que, si cediese, nos sesgaría negativamente con búsquedas a los 1.340 puntos. Si se pierde el nivel de los 1.340 puntos, sería un recorte mayor que una consolidación, y ya se entraría en escenarios negativos que, por el momento, es la opción con menor probabilidad asignada, y sigue perdiendo peso.

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El Ibex35 se sumó a los recortes con una debilidad algo superior al resto de plazas, como viene siendo habitual, presionado nuevamente por el sector bancario. Acabó por ceder un 0,78%, para cerrar en los 8.515,20 puntos, aguantando el nivel de los 8.500 puntos, y sin poder atacar de forma consistente al referencia clave más inmediata de los 8.600-8.620 puntos. 

Los 8.350 puntos siguen sin variación como soporte débil en correcciones intradiarias, pero el primer soporte no cambia y sigue continúa en la zona de los 8.250-8.200 puntos como referencia antes del pivote los 8.000 puntos. Este nivel refuerza su apoyo con la proyección de la media móvil de 200 sesiones, sobre los 8.035 puntos, con la del canal ajustado a los mínimos anteriores, y que ya está en este nivel de cara a un posible primer envite reforzándose como soporte. Sin embargo, el nivel clave lo mantenemos sobre el soporte situado en los 7.800-7.700 puntos en los mínimos del año. Es clave porque su pérdida puede marcar el nivel de cambio de dirección, y más correcciones ajustando entonces el escenario actual.

A medio plazo, para aguantar las opciones de escenarios impulsivos, la zona de soporte importante está en el nivel de los 7.700-7.550 puntos. El sesgo direccional variaría a negativo si se pierde esta zona y apuntaría ya hacia el soporte de los 7.200-7.000 puntos. Perderlo dejaría de nuevo opciones de buscar la zona de los 6.500-6.450 puntos. Después, los mínimos en los 6.000 puntos es la zona que marca de nuevo la entrada en un escenario correctivo que, por el momento, se mantiene alejada la posibilidad del mismo y por el que no apostamos, a pesar de que técnicamente, por comparación, la situación del selectivo español es más débil que la de las otras plazas. La clave se mantiene en el sector bancario, que sigue sin mejorar su aspecto técnico de una forma decisiva.

Mantenemos como zona de resistencia en el rango de los 8.600-8.800 puntos. Una extensión de avances al siguiente objetivo, situado en los 9.000 puntos, es la que nos activa el posible cambio de escenario a medio plazo, con una extensión hasta la zona de los 9.250 puntos. Las siguientes proyecciones ya se sitúan en zonas próximas a los 9.400-9.500 puntos y dan la continuidad a un escenario alcista a medio. Por el momento es por el que nos decantamos, si se logran superar finalmente los 9.250 puntos, ya que entonces se puede proyectar una figura de vuelta de suelo mayor en puntos y en plazo temporal. El riesgo para este escenario está en el corto plazo, en que no se superen los niveles de máximos, y que el techo del canal actúe como fuerte resistencia y provoque una nueva visita a la zona de bajos del mismo. Entonces tendremos un patrón amenazador correctivo, que seguimos sin poder descartar y que puede agravarse si coincide con retrocesos más consistente provocados por una sana corrección en el resto de índices más fuertes.

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