La dimisión de Monti otro factor para añadir presión sobre la Eurozona
Los cierres semanales apuntaban mucho mejor en las plazas americanas que en las europeas y la apreciación del dólar sigue[…]
Los cierres semanales apuntaban mucho mejor en las plazas americanas que en las europeas y la apreciación del dólar sigue poniendo en cuarentena la evolución de la renta variable si ahora no logra aguantar su zona de soporte más inmediata. Todo ello añade presión a la apertura europea con las primas de riesgo italiana y española al alza. Unido a que las negociaciones sobre el abismo fiscal siguen bastante estancadas y pueden seguir así hasta el final con un acuerdo de mínimos. Con este panorama está semana tocará poner en duda el rally de Navidad, con más reuniones del eurogrupo sin acuerdo sobre la supervisión bancaria y veremos si aguantan los niveles técnicos para pasada la misma volver a otorgarles opciones tras la semana del vencimiento trimestral que será la próxima.
De momento huecos a la baja en las aperturas europeas que servirán para ver la fortaleza existente si se logran cerrar o quedarán como resistencia más inmediata para validar cualquier nuevo intento de rebote.
El dólar ya ha dio a busca el apoyo a la zona de los 1,2900 en las proximidades de la proyección de la directriz de avance que presenta desde los mínimos anuales ajustada con los mínimos de noviembre y en tanto no pierda en niveles de cierre la zona de los 1,2875 mantiene su vigencia como primer soporte. La segunda zona está en los 1,2800 con el refuerzo de a media móvil de 200 sesiones sobre las proximidades de los 1,2780. Por debajo los mínimos de noviembre son el siguiente soporte en los 1,2650 que marcarían fortaleza para el dólar y la búsqueda de los 1,2400 antes de pensar en nuevos ataque a los mínimos anuales de los 1,2050-1,2000. Esto puede darse si en la eurozona se sigue complicando el panorama de las primas de riesgo italiana y española.
La zona de resistencia se mantiene en el rango de los 1,3100-1,3150 extendido luego hasta los 1,3200 para dar mayores opciones a los avances. El objetivo posterior en la zona de los 1,3400-1,3500 que sería de volver a la correlación positivo para la renta variable.
El Dow Jones cerró con un avance del 0,62% marcando un cierre en los 13.155,13 volviendo a liderar las subidas de todas las plazas americanas que estuvieron lastradas otra vez por los valores tecnológicos en el resto de índices que no sumaron tanto. Logra consolidar un cierre semanal por encima de la media móvil de 200 sesiones y de los 13.000 puntos que marcan las opciones de direccionalidad del movimiento siguiente.
La primera zona de soporte está en los 12.800 puntos, después del nivel de pivote sobre los 13.000 puntos. Por debajo la referencia de soporte que tenemos en los 12.500 puntos marca el límite al sesgo negativo dentro del lateral amplio en que quedaríamos como escenario de producirse dicha pérdida. Por debajo de este nivel nos quedamos con sesgo negativo para buscar la zona de mínimos anuales en las proximidades de los 12.000 puntos. A partir de ahí el escenario volvería a complicarse con opciones de pasar a negativo si se ataca la zona de los 11.700-11.500 puntos. Aunque sigue teniendo bajas opciones este escenario seguimos sin poderlo descartar hasta que no se marquen de forma clara nuevos máximos anuales.
En el corto plazo para validar cualquier opción de rebote pasa por superar la zona de los 13.200-13.300 puntos para tener opciones de proseguir con los avances y quedar más allá de un rebote técnico. La zona de resistencia clave sigue en los máximos sobre los 13.700 puntos a romper con volumen para que pueda validarse la ruptura de una forma consistente y propiciar las opciones del cambio de escenario. Después se deben buscar las proyecciones de los 13.800-14.000 puntos. De superarse estos niveles el siguiente objetivo ya se sitúa sobre los 14.400 puntos. La opción de este escenario positivo se verá sensiblemente reducida si se pierde de forma consistente los 12.500 puntos y nos reafirmemos en la fase de corrección respetando el lateral
El Ibex35 volvió a sufrir correcciones en el cierre semanal cediendo un 0,79% cerrando en los 7.848,50 puntos atacando el soporte de corto plazo que teníamos en los 7.845 puntos correspondientes al hueco anterior y con un apoyo ya a la directriz de avance. El hueco dejado en la apertura de hoy a la baja confirma la sobrecompra que se alcanzó y que de momento no le ha permitido atacar la zona de los 8.000 puntos que sigue como asignatura pendiente más inmediata para poder proseguir con los avances.
El primer soporte importante se mantiene en el nivel de los 7.550-7.450 puntos que está extendido con la zona la media móvil de 200 sesiones que mantiene la pendiente negativa y sigue por debajo de la banda baja de este soporte sobre los 7.375 puntos. Perder esta zona nos sesga el lateral a negativo. Para el escenario de medio plazo se ha de mantener el soporte de los 7.200 puntos que respetaría la clavicular del patrón de doble suelo. Por debajo de los 7.000 puntos nos colocamos con el sesgo negativo y dejando opciones de buscar la zona de los 6.500-6.450 puntos. Esta situación volvería a añadir presión sobre la zona de los mínimos anuales y quedaría anulado el objetivo del patrón de doble suelo. Estos mínimos en los 6.000 puntos es la zona que marca de nuevo la entrada en un escenario correctivo, que seguimos sin poder descartar en tanto que no logre romper con fuerza primero los 8.000 puntos y su extensión hasta los 8.250 puntos de entrada.
No hay cambios en la resistencia que sigue los 7.800-8.000 puntos y en tanto no supere los 8.000 puntos no da opción a mayores avances. Ahora en esa zona es donde confluye la proyección de la directriz de los últimos máximos relevantes y además es necesaria la superación de la zona de los 8.250-8.300 puntos de los máximos del último avance para tener opciones de buscar mayores objetivos. Sólo si se rompe al alza esta zona se puede pensar en ir a buscar objetivo de proyección definitivo del patrón de doble suelo aún vigente de los 8.450-8.600. Su posterior extensión a la búsqueda de los 8.800-9.000 puntos que daría opciones a un posible cambio de escenario a medio plazo. La tensión en la prima de riesgo por el contagio de la situación política italiana va a complicar de nuevo esta opción.