La edad de oro del bitcoin
La demanda de activos alternativos aumenta y las instituciones de todo el mundo ven ahora al bitcoin como un activo de crecimiento
La demanda de activos alternativos aumenta y las instituciones de todo el mundo ven ahora al bitcoin como un activo de crecimiento y la forma de protegerse del gran temor para este curso: la inflación.
Los nuevos máximos históricos son el mejor ejemplo de ello y la generosidad de los gobiernos y los bancos centrales está aquí para quedarse, lo que hace probable que el impulso del bitcoin continúe gracias a ello.
La volatilidad tendrá su protagonismo dadas las ganancias que hemos visto y habrá caídas, como las que se han experimentado recientemente, pero la tendencia a largo plazo es clara y alcista.
La cotización, por la situación de máximos registrada, no encuentra resistencias claras y desde el punto de vista técnico está prácticamente en subida libre pese a puntuales correciones. Eso sí, se encuentra en una zona de sobrecompra por la euforia.
En base a esta euforia es necesario vigilar el nivel de los 34.500 dólares y por debajo de él se observan niveles muy poco fiables en los 23.800-24.000 dólares, situándose el de mayor relevancia en la zona de los 20.000 dólares.
Falta de liquidez
Más allá del análisis fundamental y técnico del criptoactivo, la liquidez adquiere ahora una especial relevancia a la hora de invertir en bitcoin. La cantidad total que hay en circulación son 18,6 millones, un 88,5 por ciento de lo establecido por su protocolo, y se estima que unos 3 millones de esa oferta se han perdido para siempre.
Esta crisis queda reflejada en datos como que 14,5 millones de tokens se consideran ilíquidos, el 78 por ciento del total, y solo 4,2 millones, el 22 por ciento, quedarían disponibles para operar. Un escenario completamente diferente al rally de los cursos 2017 y 2018 cuando la oferta se incrementó.
Otra diferencia respecto a 2018 es que ahora el inversor que ha llevado al bitcoin a las cotas actuales es diferente al entrar el curso pasado cotizadas, inversores institucionales, family officers e incluso aseguradoras.
Ello provoca que el bitcoin se asiente este curso como un nuevo asset class, quizás no como un refugio valor por la poca liquidez y la volatilidad, pero sí como una apuesta de diversificación ante la falta de alternativas de inversión.
Además, también ayuda la nueva implicación de los bancos centrales que trabajan en sus divisas digitales y se esfuerzan en divulgar los activos digitales para mejorar el conocimiento de la población. Esto nos lleva al siempre necesario punto de la educación financiera.
Encuesta de eToro
La última encuesta de eToro sobre el Comportamiento Financiero mostraba que, con la pandemia y sus consecuencias económicas, los españoles siguen confiando en apuestas tan improbables como que les toque la lotería o dar un pelotazo creando algún tipo de negocio que cause furor.
Así, la planificación financiera no es la primera opción, ni mucho menos, y es que la mayoría reconocen que la falta de educación financiera es una barrera para mejorar sus vidas económicamente.
Este contenido es solo para propósitos informativos y no puede ser considerado como asesoramiento o recomendación de inversión. Los rendimientos pasados no son indicación de rendimientos futuros. Los CFDs son productos apalancados y conllevan un gran riesgo para el capital. eToro es una entidad regulada en Europa por la Comisión de Bolsa y Valores de Chipre bajo la licencia #109/10 y registrada en la CNMV dentro de la sección de Empresas de Servicios de Inversión del Espacio Económico Europeo en Libre Prestación. La inversión en criptoactivos no está regulada en la mayoría de los países de la UE y el Reino Unido. No hay protección del consumidor. Su capital está en riesgo.