Los cierres semanales validan la correción
Viernes vendedor en todas las bolsas, sin excepción, que aceleraron su debilidad, confirmando la pérdida de las primeras zonas de soportes.
Viernes vendedor en todas las bolsas, sin excepción, que aceleraron su debilidad, confirmando la pérdida de las primeras zonas de soportes. El trasfondo de las divisas y bolsas emergentes, con los datos de China, y los rumores de mayores retiradas de estímulos en USA están pasando factura. Más allá, incluso, de los resultados empresariales, que hoy van a tener su protagonismo con Apple. En principio, las referencias atacadas, de momento, sirven para confirmar correcciones, pero aún distan de suponer un cambio en la tendencia de fondo, que sigue estando alcista. Pero obligan a extremar la prudencia y a tener preparadas las opciones de un cambio de estrategia, vía reducción de riesgos, si el panorama se complica perdiendo las referencias claves.
El incremento de volatilidad es notable, y ya advertíamos del mismo, en lo que puede ser una tónica generalizada a lo largo del ejercicio. De momento, las pautas estacionales están disminuyendo las probabilidades de que este acabe siendo un buen año para las bolsas, al menos como lo ha sido el anterior. Por el momento, los bonos siguen sin presionar a la renta variable, pues las rentabilidades están disminuyendo y no provocan, además, tensiones sobre las primas de riesgo.
Las bolsas asiáticas han iniciado la semana con correcciones fuertes para ajustar las bajadas en EE.UU. y, en Europa, los comienzos han sido con dudas en indecisión, con signos mixtos, pero en una fase correctiva, que pueden mantenerse durante una buena parte de la jornada hasta la apertura de nuevo de las bolsas americanas, para contrastar los ánimos, si bien los futuros americanos recuperan posiciones tampoco lo hacen con un excesiva convicción.
El dólar se debilitaba contra el euro, pero en menor medida que en anteriores jornadas, puesto que el movimiento está con las monedas emergentes, que tiene como principal referencia el billete verde. No ha confirmado la superación de la primera resistencia de los 1,3700, y ahí puede seguir en la jornada de hoy. El dólar cerró la semana sin acabar de superar los 1,3700, que atacó de forma frustrada al final. Se mantiene, de forma clara, por encima del nivel de pivote de los 1,3600. Las señales de los osciladores se mantienen con sesgo positivo y, si logra superar este nivel de resistencia, la visita a los altos del año en las proximidades de los 1,380,0 quedaría como siguiente objetivo.
Los 1,3600 siguen con su rol de pivote para el corto plazo. Se ha reforzado ahora el primer soporte sobre los 1,3500, para confirmar el cambio de rango. El siguiente nivel clave, en los 1,3450-1,3400, a perder para pensar en otorgar mayores probabilidades a otros escenarios de apreciación del billete verde. La media móvil de 200 sesiones, que ha actuado como zona de referencia, está ahora sobre los 1,3365, en zona confluyente con los mínimos relativos anteriores, y puede ser la zona de fortaleza antes de los 1,3200.
Sin cambios en la zona de resistencias significativas, con el nivel de los 1,3800-1,3830 como primera zona, si pasan los 1,3700, de forma consistente. El techo del canal se proyecta sobre los 1,4000, tras ver el ataque que se ha produjo a la zona de los 1,3900 de forma puntual. Esta zona previa también es resistencia intermedia. Después se activaría el siguiente objetivo, en la zona de altos de 2011, sobre los 1,4000-1,4100, con un nuevo rango al alza.
El Dow Jones sufrió la peor jornada de los últimos seis meses, en una sesión bajista de principio a fin, acabando en mínimos y perdiendo varias zonas de soporte confluyentes, en torno a los 16.000 puntos, que a priori nos activan el proceso correctivos, hasta las siguientes referencias de soporte más importantes. El recorte fue, al cierre, de un 1,96%, para acabar en los 15.879,11 puntos. Los osciladores de corto plazo aceleraron el sesgo bajista, dentro de la zona de lecturas neutral, y se aproximan a los niveles de sobreventa, que pueden facilitar la actuación de los soportes.
Se puede buscar ya la primera zona más significativa tras la pérdida de los 16.000 puntos que tenemos, en el rango de los 15.800-15.700 puntos, con los niveles de los mínimos anteriores, que aguataron y sirvieron de base para el impulso con el que se marcaron los máximos históricos, y que están reforzados, también por los máximos relevantes anteriores, en torno a ese mismo rango. Después ya actuaría la zona de los 15.500-15.400 puntos para los retrocesos más significativos, que cuenta ya con el apoyo de la proyección de la media móvil de 200 sesiones, en esa referencia con su valor en los 15.438 puntos.
La siguiente opción, los 15.250-15.000 puntos, a no perder para no sembrar dudas. Después tenemos el nivel clave, a tener en cuenta si volvemos a tener correcciones en los 14.800-14.600 puntos, lo que supondría posible establecimiento de rango lateral y pérdida de la tendencia alcista de fondo. Perder esta zona debilitaría bastante la situación técnica, porque puede suponer buscar objetivos teóricos en los 13.500 puntos, con el riesgo de iniciar un escenario bajista. Comienzan a incrementarse las probabilidades de los escenarios más correctivos tras las últimas muestras de debilidad, pero aún nos quedan como el escenario menos probable, ganando más bazas el lateral frente a la continuidad de los avances, hasta que no se defina el soporte.
Queda pendiente, de forma clara, la superación de forma consistente, los 16.500 puntos, que vuelven a ser primera resistencia extendida hasta los máximos de los 16.600-16.650. La siguiente referencia que ha entrado en liza está en la zona de los 16.800-17.000 puntos. Mayores proyecciones sólo las podemos ajustar con extensiones, ya que seguimos estando con el escenario de subida libre, sin más referencias, y que se sitúan en el rango entre los 17.000 y los 18.000 puntos, que ya concretaremos, si nos comenzamos a aproximar. Veremos ahora la prueba de la fortaleza de fondo en que niveles de soporte aguantan los retrocesos, y si hay fuerza para seguir con los avances o se entra en zona de retroceso mayor y se apunta a un cambio de escenario.
El Ibex35 no fue ajeno a los recortes importantes, como la tensiones prevenían directamente de la zona de Latinoamérica, y los intereses de los valores del selectivo son grandes. Ahí fue la bolsa que lideró las correcciones en Europa. Tanto así, que se ha comido en dos jornadas los avances del ejercicio y ya presenta número rojos para el año. Acumuló su quinta sesión de bajada consecutiva en la peor sesión del último año. La jornada fue bajista, prácticamente de inicio a fin, con la pérdida, en cierre semanal, de las zonas de soporte, que nos dejan con opciones de que pueda continuar el proceso a buscar referencias más significativas. Cerró la sesión con un retroceso del 3,64%, en los 9.868,90 puntos, con un alto volumen de negocio, el mayor del ejercicio que hace pensar en que podamos seguir con el proceso hasta estos soportes más relevantes, para probar la fortaleza del fondo de la tendencia.
El primer soporte significativo sigue situado en los 10.000-9.800 puntos, ya se está poniendo a prueba en su parte baja, y con opciones de perderse para buscar, cuando menos, su extensión hasta los 9.700 puntos, de los mínimos anteriores, y concluyendo con la directriz acelerada del impulso. La zona del hueco dejado sobre los 9.530 puntos es otro objetivo, también probable, si persisten las fuertes correcciones. La zona clave para mantener sano el escenario, a largo plazo, se mantiene en el rango de los 9.350-9.250 puntos, en la base ajustada del canal de avance.
Después, ya la otra referencia, en los 9.000-8.800 puntos en que pueda mantenerse para validar el impulso, en caso de retrocesos más significativos, que fueran más allá de la pérdida de esta zona clavicular. Y está esta zona, ya reforzada por la media móvil de 200 sesiones, sobre los 8.954 puntos, que pueden frenar antes los retrocesos y apoyaría a que se mantuviera un sesgo alcista, más acelerado, en caso de los retrocesos más significativos, si se alcanza este nivel. Por debajo tenemos la zona de los 8.500 puntos que, de perderse, son los que se encargarían de anular opciones impulsivas y nos marcaría un posible sesgo negativo dentro del lateral, atacando los 8.200-8.000 puntos. Después tenemos referencias en los 7.800-7.600 puntos y, luego, ya hacia el soporte de los 7.200-7.000 puntos. Bajas probabilidades asignadas aún al escenario correctivo.
Al seguir con los retrocesos no hay cambios en las zonas de resistencia. La primera referencia pendiente de superar está en el rango de los 10.500-10.650 puntos. Referencias posteriores, como siguientes objetivos, los situamos en los 10.800-11.000 puntos, también, a priori, difíciles de superar a la primera, como más próximos, si se lograra superar la zona de los 10.600 puntos, de forma consistente. Por ahora se han mantenido los soportes claves y se ha propiciado un nuevo rebote, sin perderlos.
La figura de vuelta mayor quedó definitivamente confirmada, y nos deja como objetivo teórico, a medio plazo, la referencia de los 12.000-12.500 puntos. Este es el escenario más positivo por el que seguimos apostando, y aunque se puedan dar correcciones, estás se deberían mantener con la estrategia de acumular o comprar en los retrocesos en las zonas que se validen como soportes.