Máximos históricos contra el sentimiento negativo instalado en titulares
Las lecturas de sentimiento y de titulares están centradas en la debilidad, apuntando a techo de mercado y advirtiendo de posibles correcciones.
Las lecturas de sentimiento y de titulares están centradas en la debilidad, apuntando a techo de mercado y advirtiendo de posibles correcciones. Por el momento, en la sesión de ayer volvieron a desmentir las bolsas americanas a los pesimistas, puesto que lograron marcar nuevos máximos históricos y, en el caso del Dow Jones, colocarse en positivo en el ejercicio, algo que sólo se había producido de forma testimonial en sesiones intradiarias y en sólo un tímido cierre, en todo lo que llevamos de él.
En el SP500, la confirmación fue también más clara, pero, en este caso, no ha logrado superar los máximos intradiarios que se habían marcado a principios del mes pasado. Técnicamente, aún no es posible confirmar la ruptura de una forma consistente, pero con esta situación se siguen reforzando las zonas de soporte y se mantiene el fondo alcista o el sesgo del mismo, si se evoluciona hacia escenarios laterales, si no se acabara de confirmar esta situación. Las bolsas europeas no fueron ajenas a esta situación y las más fuertes volvieron a asumir el liderazgo, intentando pasar por alto la situación en Ucrania, que sigue siendo foco de inestabilidad y no se pierde de vista.
Las bolsas asiáticas han acompañado esto máximos en EE.UU., y la apertura europea sigue manteniendo el tono positivo, pero aún sin confirmar, por estos lares, la superación de niveles para dar mayor continuidad. Podemos estar de nuevo con el patrón de comprar con el rumor, en este caso de la próxima actuación del Banco Central Europeo y, si se confirma igual, desencadenar la corrección. También que estén las elecciones europeas a la vuelta de la esquina, y todo el mundo intentando vender "mejoras", el reflejo suele darse vía bursátil, sin negar que igual de efímero puede ser el avance como brusco el posterior retroceso, si esta es la interpretación sin mayor fundamento de respaldo. El dólar sigue con pruebas a la zona de soporte y, los bonos, con bajas rentabilidades, sin compensar el atractivo de la inversión en renta variable por riesgo.
Quedó una sesión más por debajo de forma clara de los 1,3800, que vuelven a quedar como referencia pivote, pero ahora de resistencia, y activando de nuevo el nivel de soporte en los 1,3700, que puede ser atacado ya en la jornada de hoy, buscando poner a prueba directrices aceleradas de soporte, ajustadas a zonas de mínimos anteriores, como una primera prueba a la posible continuidad de un movimiento direccional, más acusado en su fortalecimiento.
Los 1,3700, que son el primer soporte clave, a perder para marcar el inicio de la apreciación, que se ha reforzado con este nuevo rebote. Después, la zona de la media móvil de 200 sesiones está ahora sobre los 1,3619, mantiene su pendiente positiva de avance y con opciones de actuar como soporte por debajo de estas referencias. Después ya tenemos los niveles de los 1,3500 y los 1,3400, como siguientes objetivos mayores. La zona de los 13800 actúa como pivote, ahora de primera resistencia débil. Se quedó en puertas de alcanzar el objetivo de la zona de los 1,4000, pero de la manera que se alcanzado, seguimos teniendo vigente como zona de resistencia la zona de los 1,3900-1,3950, antes de esta siguiente referencia, y su extensión como objetivo siguiente, que teníamos marcado en los 1,4100.
El SP500 marcó nuevamente máximos históricos de cierre, superando los alcanzados en abril, aunque sin superar por muy poco las lecturas alcanzadas en intradía. Los 1.900 punto son la referencia clave para confirmar una nueva ruptura, al alza, y búsqueda del siguiente objetivo, que con el apoyo de las lecturas de los osciladores de corto plazo no hay que descartar se puede producir. El mayor volumen sería interesante que apareciera en el momento de la ruptura, si esta fuera consistente, que no fuera en una sesión de máximos de ida y vuelta. El cierre fue en positivo con un avance del 0,97%, para acabar en los 1.896,65 puntos.
Ha conseguido finalmente superar la zona de los 1.890 puntos, y puede confirmar el posible impulso, que daría opciones a la extensión del movimiento. Tenemos el rango entre los 1.900-1.910 puntos, como objetivo prioritario para el impulso, si pudiera volver a confirmarse la aparición del mismo. Y, después, ya comenzarían las proyecciones sobre niveles de los 1.945-1.950 puntos, y la mirada a la cifra redonda de los 2.000 puntos, que supondría buscar un registro más acelerado dentro del movimiento actual que, seguramente, volvería a suscitar las dudas y temores y hacer pensar en nuevas pruebas de soportes.
Sin cambios en los niveles de soporte, que se siguen reforzando con la consecución de los nuevos máximos, en especial la zona que tenemos como primer soporte débil ,en los 1.850-1.840 puntos. Después se mantiene el nivel de los 1.820-1.800 puntos, como soporte más relevante, al tener la proyección de la directriz de avance, ya sobre los 1.830 puntos, y quedar por encima de los mínimos relevantes anteriores. Los 1.750-1.740 puntos quedan como nivel clave a no perder, reforzando a este soporte por encima la proyección de la media móvil de 200 sesiones, en los 1.782 puntos, que mantiene una pendiente de avance muy estable. Si se pierde marca entrada en rango lateral, quedaría en sesgo más negativo la zona de los 1.700 puntos.
El siguiente nivel de soporte, en los 1.680-1.660 puntos, y la extensión del mismo hasta 1.650 puntos, respetando el ajuste con los últimos mínimos significativos de octubre del pasado año, que es el que supondría amenazar también la continuidad del escenario lateral. Después tenemos la zona de soporte en los 1.600-1.580 puntos. Niveles por debajo volverían activar los escenarios de entrada, en posible corrección, que no son nuestra apuesta, pero que significarían ir buscando niveles teóricos de retroceso, primero en la zona de los 1.500 puntos, y con posibles proyecciones hasta la zona de los 1.400-1.370 puntos, si fuera con mayor intensidad. Por ahora, este escenario sigue contando con baja probabilidad de ocurrencia, y el sesgo es positivo, a medio plazo, aún pudiendo quedar dentro de un lateral.
El Ibex, en línea con el resto de plazas europeas, acabó con avances, y situándose de nuevo por encima de los 10.500 puntos, pero sin superar la zona de altos de la semana pasada, y la zona del rango de resistencia, extendido hasta los máximos anuale,s que quedan por encima de los 10.700 puntos. Los osciladores de corto plazo renuevan las muestras de giro, al alza, dentro de la zona de lecturas de sobrecompra, y aún se mantienen las opciones para buscar rebote, si finalmente se logran superar los 10.600 puntos de forma consistente, y se buscan los máximos anuales. Ayer el volumen no apoyaba en exceso la precio y, probablemente, será necesario un aumento del mismo para forzar la ruptura al alza. Cerró la sesión con un avance del 0,76% para acabar en los 10.567,00 puntos.
Con el nuevo avance, aunque no supera los altos, no hay cambios en los niveles de soporte, sigue el simple ajuste al alza los niveles dinámicos de las directrices y medias. El nivel de los 10.200 puntos, actuando como primer soporte débil, con el apoyo de la directriz acelerada de avance ajustada, que sigue vigente ahora sobre los 10.230 puntos reforzando este primer soporte. El siguiente en la zona de pivote de los 10.000 puntos para mantener también sin cambios en los soportes claves de medio plazo, el primero en los 9.700 puntos de los mínimos anteriores.
Después ya está la zona del hueco dejado sobre los 9.530 puntos, que se ha reforzado ya con la proyección de la media móvil de 200 sesiones, en los 9.692 puntos, y confluyendo con la proyección de la actual directriz primaria de avance, con la que se mueve, casi en paralelo unos 100 puntos por debajo. Esta zona puede frenar los retrocesos más significativos, apoyando a que se mantuviera un sesgo alcista menos acelerado, en caso de los recortes más marcados.
Para mantener sano el escenario a largo plazo, ha de aguantar en el rango de los 9.400-9.250 en caso de retrocesos importantes. Los 9.000 puntos quedan en zona de atracción por cifra redonda, pero sin relevancia técnica, a priori. Por debajo tenemos la zona de los 8.800 puntos que, de perderse, son los que se encargarían de anular opciones impulsivas y nos marcaría un posible sesgo negativo, dentro del lateral, atacando los 8.200-8.000 puntos. Después tenemos referencias en los 7.700-7.500 puntos, que nos cambia el escenario a correctivo. Mantenemos todavía muy bajas probabilidades asignadas aún al escenario correctivo, que sólo comenzarán a incrementarse si se pierde la zona clave de los 9.400 puntos.
Sigue pendiente para confirmar la opción de un nuevo impulso, la superación 10.600 puntos de forma consistente y la búsqueda de la zona de máximos anules de los 10.700 puntos. El objetivo seguiría estando en la superación de estos máximos anuales, y buscar referencias posteriores como siguiente objetivo en los 10.800-11.000 puntos, también en principio difíciles de superar a la primera, aunque contando con la opción de extenderse hasta los 11.250 puntos. Por ahora se han mantenido los soportes claves, que nos respetan la vigencia de la figura de vuelta mayor y que nos deja como objetivo teórico, a medio plazo, la referencia de los 12.000-12.500 puntos. Esta opción es la preferida, por el momento, pero según la pauta del ejercicio, podemos seguir en amplio lateral, y sólo despejar incertidumbre en la parte final del ejercicio, si no se ha dañado la estructura de soporte.