La continuidad de la tensión en el mercado de deuda tras la cumbre es mala señal
El ruido se lo ha llevado el aislamiento en el que se ha quedado por ahora el Reino Unido, las pocas nueces es volvemos a tener falta de concreción en las medidas reales para salir adelante con la crisis. El factor para
impulsar el crecimiento económico frente a tanta austeridad acordada es
por donde cojea el plan. Y ello puede seguir pasando factura al
mercado. Es cierto hay que gastar menos, pero ¿cómo se estimula el
crecimiento para poder pagar lo que se debe? Si no hay inversión
productiva, no parece posible romper el círculo vicioso. También
seguimos esperando para saber si el papel que se va a otorgar al BCE va a
ser efectivo, y persiste la duda de dónde van a salir los fondos para
evitar realmente el contagio.