Pesan los altos, pero las ventas ejercen poca presión

Las bolsas parece que están con la necesidad de consolidar los avances. Aparecen excusas que provocan movimientos bruscos de corrección que, posteriormente, son minimizados, pero que pueden ir haciendo mella en los avances. Las tensiones geopolíticas que no se resuelven en Ucrania, y ahora también en Irak, motivan trasvases de posiciones de renta variable a bonos como condición refugio, por que los rendimientos de los mismos siguen bajo mínimos. Subía el petróleo, pero esta vez en EE.UU., con su gran avance en producción, a través de la fragmentación, ya no es motivo para un despliegue bélico de envergadura mayor, como ha podido parecer en ocasiones anteriores.

Los cierres semanales endulzaban los recortes de las últimas sesiones, pero lo cierto es que, sin perder niveles que puedan suponer, por el momento ningún cambio, desde la perspectiva del análisis técnico. Se pueden tomar algunas decisiones de reducción de riesgo por mal de altura, pero no se pueden abrir posiciones cortas. Técnicamente seguimos sin cambios, la tendencia alcista no ha cambiado, las opciones de aparición de un techo de mercado, por ahora, son reducidas, pues seguimos corrigiendo a zonas de soporte débiles, que parecen resistir los primeros envites. La consolidación para corregir la sobrecompra se puede dar consumiendo precio o tiempo y, de momento, los niveles de precios corregidos no son demasiado acusados, y se aguantan primeras referencias de soporte, que han sido resistencias superadas, de forma previa y con poco testeo.

El dólar sigue buscando la prueba de nuevo de la zona de soporte de los 1,3500, tras no haber podido consolidarse en la zona de los 1,3600, y de forma clara se queda por debajo de la media móvil de 200 sesiones, sobre los 1,3659, que define la zona de resistencia primera, cobrando mayor importancia. Después le seguiría el nivel de los 1,3700 y los 1,3800, para pensar en una vuelta a los avances. De momento se dirige a probar la zona de soporte clave de los 1,3500, cuya pérdida sí que podría activar recortes mayores a la zona de los 1,3400.

El Dow Jones cerró la semana con una última sesión de avances, pero dejando un patrón que aún puede optar por la continuidad de los retrocesos, a seguir probando soportes. Quedaron finalmente en la semana pendientes los 17.000 puntos y, de momento, se hace la prueba de la última zona de resistencias superadas, que estaba fijada en los 16.600 puntos y que es el primer nivel de soporte débil. El volumen de la última sesión del viernes con la subida fue superior al del resto de sesiones de la semana. Los osciladores de corto plazo ya están en la zona de lecturas neutral, con el sesgo negativo y la sobrecompra ya se ha corregido de forma significativa. Al cierre se anotaba un avance del 0,25%, para acabar en los 16.775,74 puntos que, de momento, respetan las primeras zonas de soporte y dejan abiertas las opciones para tener un nuevo impulso de continuidad en el escenario.

Ajustamos la zona de soporte débil sobre los 16.700 puntos, pero extendida en todo el rango hasta los 16.500 puntos. Se refuerza la primera zona de soporte relevante, en la parte alta del rango que tenemos en el corto plazo, en los 16.200-16.000 puntos. La proyección de la media móvil de 200 sesiones refuerza la misma como soporte sobre los 16.021 puntos, y con la proyección de la actual directriz acelerada de avance, que supera ya los 16.150 puntos.

La clave está en esta referencia de los 15.800 puntos, que no debe de perderse para no dar opciones a acelerar la corrección. Con su pérdida obligaría a vigilar la zona clave de los mínimos anteriores, sobre los 15.400 puntos con la extensión hasta los 15.350 puntos, en los que han quedado los mínimos anuales, a no perder para no sembrar dudas que nos colocarían en un escenario más lateral. Atacando después el nivel de los 15.000-14.800 puntos lo que confirmaría el establecimiento de rango lateral y pérdida de la tendencia alcista de fondo.

Perder esta zona debilitaría bastante la situación técnica, porque puede suponer buscar objetivos teóricos en los 13.500 puntos, con el riesgo de iniciar un escenario bajista, que mantenemos con menor probabilidad de ocurrencia, asignada hasta ahora cuando finalmente se han conseguido marcar, de forma consistente, nuevos máximos históricos.

La superación de los 16.700-16.750 puntos es la referencia ha validado el nuevo impulso, y quedamos dentro de la zona alta del siguiente rango de los avances, situado en los niveles de los 16.800-17.000 puntos que siguen pendientes de superar, de forma consistente, para traspasar el siguiente rango de avances. Mayores proyecciones sólo las podemos ajustar con extensiones, ya que seguimos estando con el escenario de subida libre, sin más referencias. La primera extensión se proyecta en la zona de los 17.150-17.350 puntos. Después la zona de los 17.550-17.600 puntos, antes de la siguiente proyección en los 17.800-18.000 puntos. Si sigue la pauta, hasta el momento tocarán consolidaciones en cada uno de los intervalos, sin apreciarse a priori mucha verticalidad.

El Ibex cerró la semana con un saldo positivo muy leve, tras haber marcado nuevos máximos anuales que podría estar consolidando con un posible patrón de continuación. Veremos cómo se inicia la semana, a la espera de la FED. El resto de plazas corregían, salvo el moderado avance del selectivo español, evidenciando los síntomas de necesitar el descanso para digerir los niveles de precios alcanzados. Los osciladores han girado en la zona de lecturas de sobrecompra, lo que puede propiciar la consolidación, bien consumiendo tiempo o precio y probando las zonas de soporte débiles. Cerró la sesión con un avance del 0,22%, para acabar en los 11.113,70 puntos.

Se ha atacado ya el siguiente rango, proyectado en los 11.150-11.200 puntos, que ya no se han podido superar a la primera, ya que son una confluencia importante de varios niveles de resistencia. Si se logran romper de forma consistente después, ya tenemos referencias en los 11.500 puntos para, finalmente, situarnos en la zona de los 11.800-12.000 puntos y aproximarnos al objetivo teórico marcado. Por ahora se han mantenido los soportes claves que nos respetan la vigencia de la figura de vuelta mayor y que nos deja como objetivo teórico, a medio plazo, la referencia de los 12.000-12.500 puntos. Esta opción es la preferida por el momento, pero veremos si no hay necesidad de testear niveles de soporte inferiores significativos, antes de poder buscar nuevas proyecciones, hasta el objetivo teórico final del patrón de vuelta mayor.

Se ajusta hasta el nivel de los 10.900-10.800 puntos, como primer soporte débil, con una segunda referencia, a tener en cuenta en los 10.600-10.500 puntos, que ya tiene el apoyo de la directriz acelerada de avance ajustada, que sigue vigente entre este rango de puntos. El siguiente en la zona de pivote de los 10.300-10.000 puntos, para mantener también, sin cambios, en los soportes claves de medio plazo, el primero en los 9.900-9.750 puntos de los mínimos anteriores, que se ha reforzado ya con la proyección de la media móvil de 200 sesiones en los 9.952 puntos, y confluyendo con la proyección de la actual directriz primaria de avance, con la que se mueve en paralelo unos 120 puntos por debajo.

Esta zona puede frenar los retrocesos más significativos, apoyando a que se mantuviera un sesgo alcista menos acelerado, en caso de los recortes más marcados. Después ya está la zona del hueco, dejado sobre los 9.530 puntos, y para mantener sano el escenario a largo plazo, ha de aguantar en el rango de los 9.400-9.250, en caso de retrocesos importantes, sino ya nos volvemos a colocar dentro de un lateral. Los 9.000 puntos quedan en zona de atracción por cifra redonda, pero sin relevancia técnica a priori. Por debajo tenemos la zona de los 8.800 puntos que, de perderse, son los que se encargarían de anular opciones impulsivas y nos marcaría un posible sesgo negativo, dentro del lateral, atacando los 8.200-8.000 puntos.

Después tenemos referencias en los 7.700-7.500 puntos, que nos cambia el escenario a correctivo. Mantenemos todavía muy bajas probabilidades asignadas aún al escenario correctivo, que sólo comenzarán a incrementarse si se pierde la zona clave de los 9.500 puntos de la que seguimos alejados.