Pulso en Europa ante el cierre de Wall Street
Los cierres semanales dejaron incógnitas para resolver, pues los patrones apuntados en los gráficos semanales no son contundentes y necesitan de confirmaciones para dar pie a la continuidad de los recortes.
Los cierres semanales dejaron incógnitas para resolver, pues los patrones apuntados en los gráficos semanales no son contundentes y necesitan de confirmaciones para dar pie a la continuidad de los recortes. Dudas que aparecen con los mercados de bonos y poca definición con las divisas, alimentan la situación de incertidumbre, ya que en el inmediato corto plazo hay contrastes entre lo observado en las bolsas europeas y, de nuevo, las americanas, más fuertes para no perder la costumbre. Ahora bien, los fondos alcistas de la renta variable siguen sin cambios y, por ahora, alejados de amenazas mayores que simples correcciones a buscar zonas de soporte.
La semana la iniciamos huérfanos de Wall Street y con Londres cerrado, con lo que el impacto en los volúmenes, sin duda, va a ser significativo. Será una prueba para las bolsas de la Europa continental que, de momento, se despiertan con una nueva bajada en el Nikkei, superior al 3% que, si bien el viernes lograba esquivarla, hoy ya no ha sido posible. Su ajustes en este caso es más claro a los fuertes avances acumulados en su último impulso. Los futuros apuntan por ahora a inicios levemente al alza, pero veremos si no es un síntoma de debilidad como en la sesión del viernes en la que, finalmente, se acabaron por confirmar las correcciones, a pesar de los cierres planos en EE.UU. La ausencia de datos significativos también va a dejar a la jornada con mínimas referencias.
El dólar mantuvo la zona de los 1,2900 como pivote, mantiene las opciones de rebote y su opción de actuar como amortiguador para los recortes de las bolsas. Mantiene pendiente el ataque con éxito a la zona de los 1,3000 y el soporte clave en los 1,2800, sin cambios para iniciar al semana. La zona de resistencia de los 1,3000, que está reforzada con la media de 200 sesiones, y después tenemos como activa y clave la zona de los 1,3200. Si la supera de forma consistente, el siguiente objetivo ya se situaría en la zona de los 1,3400-1,3500 para recuperar el impulso y proyectar un mayor movimiento direccional.
El soporte de los 1,2800-1,2700 sigue como primera referencia fuerte, y es la zona que marca la pérdida de las opciones impulsivas al sesgar el lateral, a la baja, si finalmente cede, con cierto patrón amenazante, que sería de continuidad correctiva, no tanto de giro como nos tiene habituados. El siguiente objetivo ya iría a buscar la zona de los 1,2500-1,2400, y de ahí ya volveríamos a entrar en zona correctiva con la mirada puesta en los 1,2200-1,2000.
El SP500 cerró con recortes testimoniales del 0,06%, para acabar cerrando en los 1.649,60 puntos, volviendo a cerrar alejado de los mínimos de la sesión y próximo a los niveles de la apertura. Si bien es cierto que ni perdió los mínimos del jueves ni tampoco puedo superar sus máximos, dejando un patrón de agotamiento, pero menor al ser un "inside bar", que nos deja pendientes para la próxima sesión sus puntos de ruptura para definir dirección más inmediata. No pierde de forma consistente al cierre las referencias de soporte débiles, que volvieron a perforarse de forma clara en la sesión en sus zonas de mínimos.
Para validar las opciones de rebote tiene que recuperar de forma consistente los 1.660 puntos, y si dejamos los siguientes objetivos, los proyectamos hasta la zona de los 1.680 puntos y, posteriormente, ya en los 1.700 puntos, que supondrían extenderse más allá del canal acelerado actual y buscar la antigua proyección de techos, que arrancaba en la zona de mínimos del año 2009.
Mantenemos pues el soporte débil sobre los 1.635 puntos, y reforzamos hasta la base del canal acelerado actual como soporte los 1.600-1.585 puntos, y aguantamos la referencia de soporte sobre los 1.545-1.535 puntos para un primer retroceso más significativo. Continúa la proyección del soporte más fuerte en los 1.500-1.480 puntos, para no perder opciones en el impulso acelerado que se refuerza al acercarse ya la proyección de la media móvil de 200 sesiones sobre los 1.490 puntos. Perder este nivel sí que nos colocaría en lateral, con otra referencia de soporte en la zona de los 1.430-1.400 puntos que, si cediese, nos sesgaría negativamente, con búsquedas a los 1.340 puntos. Si se pierde el nivel de los 1.340 puntos, sería un recorte mayor que una consolidación, y ya se entra en escenarios negativos que, por el momento, es la opción con menor probabilidad asignada, aunque se confirmen las primeras correcciones.
El Ibex35 volvió a sufrir más que el resto de plazas, y se anotó un recorte del 0,95%, para acabar cerrando en los 8.264,60 puntos tras haber atacado en los altos del día, sin éxito en la referencia de los 8.400 puntos. No logró cerrar el hueco dejado, que sigue como clave en el corto plazo, para tener opciones de volver a tener posibilidades de buscar la zona de resistencia.
Los 8.350 puntos se perdieron como soporte débil en correcciones intradiarias, mientras que aguantó el primer soporte sobre la zona de los 8.250-8.200 puntos, como referencia antes del pivote los 8.000 puntos. Este nivel refuerza su apoyo con la proyección de la media móvil de 200 sesiones, sobre los 8.060 puntos, y con la del canal ajustado a los mínimos anteriores, con el que discurre, casi en paralelo, reforzándose como soporte. Es la primera referencia significativa a tener en cuenta, sin embargo, el nivel clave lo mantenemos sobre el soporte situado en los 7.800-7.700 puntos en los mínimos del año. Es clave porque su pérdida puede marcar el nivel de cambio de dirección y más correcciones, ajustando entonces el escenario actual. A medio plazo, para aguantar las opciones de escenarios impulsivos la zona de soporte importante, está en el nivel de los 7.700-7.550 puntos.
El sesgo direccional variaría a negativo si se pierde esta zona, y apuntaría ya hacia el soporte de los 7.200-7.000 puntos. Perderlo dejaría de nuevo opciones de buscar la zona de los 6.500-6.450 puntos. Después, los mínimos en los 6.000 puntos es la zona que marca de nuevo la entrada en un escenario correctivo que, por el momento, se mantiene alejada la posibilidad del mismo, y por el que no apostamos, a pesar de que técnicamente, por comparación, la situación del selectivo español es más débil que la de las otras plazas.
Los rebotes deben atacar ahora la zona del hueco sobre los 8.450-8.500 puntos, que actúan como primera resistencia, y mantenemos la clave en el rango de los 8.600-8.800 puntos, que sigue reforzándose de cara a las opciones de medio plazo. Una extensión de avances al siguiente objetivo, situado en los 9.000 puntos, es la que nos activa el posible cambio de escenario a medio plazo, con una extensión hasta la zona de los 9.250 puntos. Las siguientes proyecciones ya se sitúan en zonas próximas a los 9.400-9.500 puntos y dan la continuidad a un escenario alcista a medio. Por el momento, es por el que nos decantamos si se logran superar finalmente los 9.250 puntos, ya que entonces se puede proyectar una figura de vuelta de suelo mayor en puntos, y en plazo temporal.
Sigue abierto el riesgo para este escenario, pero en el corto plazo no se superan los niveles de máximos, como está sucediendo ahora, que el techo del canal actúa como fuerte resistencia y provoque una nueva visita a la zona de bajos del mismo, cerca de los mínimos del año. Entonces tendremos un patrón amenazador correctivo, que seguimos sin poder descartar.