Bitcoin: ¿qué podemos esperar de la cotización en 2020?
La cotización de bitcoin comenzó 2019 ligeramente por encima de los 3.000 dólares y a finales de junio rondaba los[…]
La cotización de bitcoin comenzó 2019 ligeramente por encima de los 3.000 dólares y a finales de junio rondaba los 13.000 dólares, una subida en torno al 279% que ha quedado reducida prácticamente a la mitad en una segunda parte del año para olvidar, marcada por el cerco de los reguladores a Libra, la moneda digital promovida por Facebook. Las esperanzas puestas en esta 'stablecoin' promovida por la red social desataron el rally pero también lo han pinchado, en vistas de que el proyecto ha quedado aparcado 'sine die' a la espera de un mejor clima regulatorio. En la última parte del año, además, China ha desenterrado el hacha de guerra tras dejar claro que cuenta con la cadena de bloques (blockchain) como una de las tecnologías del futuro pero no así con bitcoin, luego de estrechar el cerco sobre distintos brókers que operan en el país.
Estos dos factores han sido críticos para explicar por qué bitcoin ha perdido fuelle de esta manera, aunque tampoco hay que perder de vista el ruido que siempre provocan los cambios masivos de precios o los eventos que relacionan a bitcoin y otras divisas digitales con las estafas, la evasión fiscal o el lavado de dinero. Una de las últimas ha trascendido hace unas semanas, tras saberse que los responsables del fraude piramidal de la firma PlusToken, cuyo ruido tumbó los precios por debajo de los 7.000 dólares, habrían inundado el mercado con las divisas estafadas en la segunda parte del año, lo que habría ejercido más presión bajista en la cotización.
A pesar de todos estos obstáculos, bitcoin ha aguantado por encima de los 7.000 dólares, un soporte que los analistas técnicos consideran vital, y lo ha hecho sin tener que soportar una excesiva presión bajista. Por eso, es posible pensar en que 2020 podría volver a ser un buen año para la divisa digital. Y así lo vienen advirtiendo ya algunos analistas importantes del mercado, como Mike Novogratz, de la firma Galaxy Digital, que ve un nuevo máximo de bitcoin en los 20.000 dólares para principios de 2021, lo que supondría una subida del 180% desde los actuales niveles, según ha comentado este gestor en declaraciones a la CNN. La misma línea es la que defiende Travis Kling, gestor de la firma Ikigai Asset Management, quien ha afirmado en una entrevista reciente que habrá nuevos máximos de bitcoin por encima de los 20.000 dólares.
Entre los analistas más seguidos en Twitter, tampoco faltan las voces que ven un rebote de los precios en 2020, como es el caso de Dave the Wave, un destacado analista técnico, que ha dicho recientemente que espera que los precios de bitcoin se ajusten a la baja en la primera mitad de 2020, pudiendo hacer suelo en torno a los 6.000 dólares, y luego exploten en la segunda mitad del próximo año hasta cerca del máximo histórico de 20,000 dólares. A principios de 2021, espera que el precio de la criptomoneda líder haya publicado "nuevos máximos sostenibles de todos los tiempos". Al igual que ahora dice esto, hace unos meses, cuando bitcoin rebasó los 10.000 dólares, este experto denunció la irracionalidad del movimiento alcista y predijo una vuelta bajista hasta los 6.700 dólares, lo que finalmente se ha cumplido.
Entre las razones fundamentales que casi todos los expertos citan para apoyar un rally alcista de bitcoin el año que viene, la más destacada es el 'halving' o reducción a la mitad de la remuneración que reciben los mineros de bitcoin. Obviamente, al ser una restricción de la oferta monetaria en circulación, la medida debería suponer una presión alcista sobre la cotización, como así ha sucedido en las dos ocasiones anteriores en que este procedimiento de ha puesto en marcha. Así, en 2012, cuando la recompensa pasó de 50 a 25 bitcoins, la cotización de la divisa digital se disparó casi un 8.200% en un año, mientras que en el 'halvening' de 2016, los precios aumentaron el 2.200% en los dieciocho meses siguientes.
Sin embargo, esto no quiere decir que las cosas tengan que ser así esta vez. "El halving genera cierta expectación pero en el cliente más retail, más afecto al pelotazo. Es verdad que en el pasado se ha visto un aumento de precios pero esa historia no me la acabo de creer", dice Javier Molina, analista de eToro en España. "Todo es posible", apunta este experto, en cuya opinión hay mucha probabilidad de que no veamos ahora lo que se vio en el pasado. Y pone como ejemplo la atención mediática que hubo en esas anteriores ocasiones y que ahora no es la misma. Hay un dato muy sencillo y es que el interés de bitcoin en Google Trends nunca recuperará lo que se vio en 2017. "Han cambiado las tornas, ya no se va a ir en esos pelotazos que se dieron en años anteriores, y la clave está en si al final se terminará considerando bitcoin como una reserva de valor o no", recalca Molina.
Esta es precisamente la incógnita que se dirimirá en 2020 respecto a bitcoin, ver si la moneda es capaz de afianzar su papel como una clase de activo en sí misma. Es decir, pasar de ser una prueba del dinero electrónica a ser un asset class o una reserva de valor, "lo que implica que se empieza a abrir hacia el lado institucional", asegura Molina. Esta transformación es importante y 2020 será el año en el que veremos si este primer paso se convierte en algo más y deriva por fin en ese propio 'asset class'.
Por supuesto, la llegada del dinero institucional es que podría dar otra dimensión al rally de bitcoin, colocarlo en otro estadio superior. Y de momento, los expertos creen que este dinero con mayúsculas apenas supone el 10% del mercado, movido en un 90% de su volumen por los clientes minoristas. Por eso, iniciativas como la de Bakkt, la plataforma para la negociación de futuros promovida por la New York Stock Exchange y que incorpora contratos estandarizados aptos para las instituciones, es un hito importante que muy probablemente irá a más en 2020. Tuvo un estreno frío a mediados de septiembre, pero ha batidos récords de negociación a mediados de diciembre, señal de que comienza despegar. Wall Street sabe que aquí hay dinero y quiere participar, con lo que el año nuevo podría suponer el despegue definitivo de esta plataforma.