¿Es 2021 un buen año para invertir en inmuebles?
Comprar una vivienda será una buena inversión este ejercicio tanto para alquilarla como para vender más tarde
La compraventa de viviendas se desplomó un 17,7% en 2020. La incertidumbre, junto a la crisis provocada por el coronavirus, y el parón de la actividad desencadenado fueron los principales motivos. El número de transacciones se situaron en niveles de 2011 cuando estalló la burbuja inmobiliaria.
Sin embargo, en diciembre se produjo una recuperación de las operaciones, con un incremento del 3%. Estos dos datos son muy dispares, por lo que podría surgir dudas si es un buen momento para invertir en inmobiliario este año.
Ferrant Font, director del servicio de estudios de pisos.com, señala que la vivienda sigue siendo una buena opción de inversión tanto comprar para vender más tarde como comprar para alquilar, y más de cara a este año, por varios motivos.
“Por un lado, el precio de la vivienda no cayó en 2020 como se esperaba”, recuerda Font.
Así, los portales inmobiliarios esperaban que la caída del precio de la vivienda estuviera en torno al descenso del PIB, un 10%, pero lo cierto es “que ha cerrado prácticamente plano”, recalca.
En cambio, otros activos bursátiles sí que registraron fuertes pérdidas en 2020. Por poner un ejemplo, el Ibex se dejó un 16% a pesar del rally que se anotó por las vacunas.
Esto no quiere decir que a largo de 2021 no haya caídas del precio de la vivienda ya que dependerá mucho de la recuperación económica, evolución del paro, y ritmo de la vacunación, pero será inferior en torno al 4-7%, “por lo que puede ser una opción de entrada a inversores”.
En relación a cuánto puede rebajar el precio de la vivienda, Font destaca que varía en función de las necesidades del vendedor.
Los expertos esperan también que se reactive la compra por parte de inversores extranjeros. La demanda inmobiliaria extranjera crecerá un 20% en 2021, según estimaciones de pisos.com, gracias a la apertura paulatina de fronteras entre países.
Este aumento tendrá influencia en todos lo segmentos de compra, tanto en primera vivienda, segunda residencia como en inversión. Además, el alquiler turístico volverá a recuperar parte del terreno perdido en 2020 a favor del alquiler residencial.
Se mantiene la rentabilidad de la vivienda
La opción de comprar para alquiler seguirá siendo rentable. De hecho, en España se sitúa en un 6,8%, un 0,2 punto más que en 2019 (6,6%) y un 1,5 punto más que hace cinco años (5,3%), según un estudio de Fotocasa.
“En 2020 la rentabilidad de la vivienda ha alcanzado la cota más alta de los últimos 10 años, en concreto se sitúa en un 6,8%. Esto es debido a que el precio del alquiler ha subido con fuerza en los últimos años y hace que comprar una vivienda para ponerla en alquiler sea altamente rentable”, afirman en Fotocasa.
Aunque depende mucho de la provincia, puesto como se recoge en el informe de Fotocasa hay varias provincias donde la rentabilidad de la viviendalestá por encima de la media. Estas son Toledo (8%), Valencia (7,4%), Sevilla (7,3%), Lleida (7,2%), Navarra (7,1%), Huelva (7,1%), Castellón (7,1%), Murcia (7%), Segovia (7%) y Almería (6,9%).
De hecho, es casi imposible encontrar ahora mismo en el mercado productos financieros que den estas rentabilidades cercanas al 7%. No obstante, “la moderación del precio de la vivienda en 2020 ha hecho que en un año tan sólo suba dos décimas la rentabilidad”, explica Anaïs López, directora de comunicación de Fotocasa.
Vigilar el precio del alquiler
Con todo, habrá que vigilar de cerca el precio del alquiler, que se verá impactado por la crisis y la incertidumbre puesto que “muchas familias que pensaban cambiarse de casa, lo pospondrán”, indica Font.
El experto habla de una caída del 10% del precio, especialmente muy importante, en las grandes capitales por varios factores como el desplazamiento de grandes centros urbanos como consecuencia del teletrabajo, la caída del alquiler turístico y la ausencia de turismo internacional, y la parte de población afectadas por ERTE o ERE.
Sin embargo, teniendo en cuenta la incertidumbre que rodea a otros activos, es muy difícil encontrar alternativas que ofrezcan una rentabilidad del 6% bruta como ofrece la vivienda.
En ese sentido, tampoco cree que la normativa para limitar los precios del alquiler pueda pasar factura puesto que “si vemos lo que ha pasado en otras ciudades como Berlín o París, apenas tuvo efecto, aumentando el precio y subiendo las operaciones en B, o, reduciendo la oferta”.