El Gobierno marginará los planes de pensiones privados en favor de los de empresa

Al Gobierno de coalición le interesa impulsar los planes de pensiones de empresa, pero como compiten con los planes privados que comercializan las entidades financieras, tiene previsto desincentivar estos últimos. Y lo hará con una mejora de la fiscalidad en detrimento de los planes privados.

Es lo que ha anunciado hoy el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, durante su comparecencia en la Comisión de Seguimiento y Evaluación de los Acuerdos del Pacto de Toledo del Congreso. Además, el gobierno impulsará los incentivos para que los españoles retrasen la edad de jubilación.

Los planes de pensiones privados son uno los productos con mayores ventajas fiscales. De hecho, este es prácticamente su principal atractivo, al ser productos pensados para fomentar el ahorro futuro.

Los planes de pensiones permiten una reducción directa de la base imponible del contribuyente

Así, permiten una reducción directa de la base imponible del contribuyente, que tendrá como límite el 30% de los rendimientos del trabajo o la cantidad de 8.000 euros, siempre la menor de ambas cifras.

Pero el Gobierno pretende con este cambio que la fiscalidad favorable recaiga en los planes de pensiones de empleo colectivo, desplazando hasta estos productos la fiscalidad favorable.

Escrivá ha defendido el menor coste y mayor rentabilidad de estos planes de empleo, que se acuerdan en la negociación colectiva con aportaciones de empresa y trabajadores, y que, por ejemplo, funcionan con éxito en el País Vasco.

Menos comisiones para los bancos

El problema se le presenta a los bancos, que ven cómo una importante vía de negocio entre en serio peligro. Los planes de pensiones son productos fuera de balance, y no afectan a los niveles de capital, pero su comercialización supone para los bancos unos jugosos ingresos en comisiones. Y es lo que la medida ha puesto en solfa.

Pero la medida también va en contra de los ahorradores. Los planes de pensiones de empleo son productos que normalmente solo tienen las grandes empresas pero raras veces se encuentran en las pymes, que suponen más del 90% del tejido productivo español. Eso sin contar con que los ahorradores se quedan sin el producto que hoy en día más incentiva el ahorro.

Todos estos factores no les ven en la Seguridad Social, donde  defienden el sentido de "trasladar la fiscalidad de un lado a otro" así como las ventajas de estos planes para las rentas más bajas.

Jubilaciones anticipadas

Por otro lado, a Escrivá, que nunca le gustaron las jubilaciones anticipadas, se le ha presentado la oportunidad de revisar la forma y los elementos sobre los que se calculan las penalizaciones que se aplican a quien optan por jubilarse antes de tiempo. Aunque en la teoría es del 8 %, en la realidad es inferior, sobre todo en el caso de las bases de cotización más elevadas.

"El incentivo es regresivo", ha apuntado Escrivá, que ve "margen de rediseño para que resulte más desincentivo". Las jubilaciones anticipadas voluntarias, que el año pasado supusieron el 16 % del total, han aumentado un 66 % desde 2014.

Junto a esto, y enmarcado en el mismo objetivo de acercar la edad real de jubilación a la legal, el Gobierno quiere mejorar los incentivos para prorrogar la edad de retiro, así como darles más difusión.

Por cada año que la edad de jubilación aumenta, ha cifrado Escrivá, se resuelve un 25 % del problema entre el gasto actual y el futuro, un gasto que, según cálculos recogidos de la AIReF, rondará el 13,5 % del PIB en 2048.